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| Foto: José Manuel Álvarez Rey / Getty Images |
Claudio Giráldez afronta con optimismo el presente del Celta y desea que el equipo mantenga la dinámica positiva que marcó el mes de octubre. El técnico se muestra satisfecho con el rendimiento reciente de sus jugadores, destacando que “hacer un mes sin derrotas, en tres competiciones, es complicado y habla de que hemos sido capaces de competir incluso en los partidos en los que no hemos estado tan bien”. Considera que la efectividad ofensiva ha sido clave en este tramo, aunque reconoce que todavía existe margen para mejorar en la continuidad del juego.
Pensando en el próximo compromiso ante el Levante, Giráldez advierte de la dificultad del rival. Valora su buena trayectoria y el impulso con el que llega tras una gran temporada anterior en Segunda División. “Tenemos que adaptarnos a un rival con muy buena dinámica, que compite bien ante cualquiera”, explica, añadiendo que el contexto del encuentro también supondrá un desafío. “No es habitual jugar a 24 o 25 grados en noviembre; debemos centrarnos en lo importante, que es LaLiga, y mantener la continuidad en el juego”.
En el plano institucional, el entrenador evita mostrar preocupación por la necesidad del club de realizar ventas antes del 30 de junio para equilibrar cuentas. “No soy un experto en esto, confío plenamente en nuestros dirigentes. No me preocupa para nada, no nos debe alarmar”, afirma con serenidad. Subraya que existe una comunicación fluida con la directiva y que el objetivo común sigue siendo el crecimiento y la estabilidad del proyecto, siempre con paciencia y unidad.
Sobre el rumbo del equipo, Giráldez insiste en la importancia de seguir sumando triunfos sin perder de vista el proceso de evolución. “Queremos ganar siempre, eso te aclara el panorama y hace que todo se vea más positivo. Pero lo fundamental es que el equipo siga mejorando y evolucionando. Estoy convencido de que los resultados van a llegar”, concluye el técnico.
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