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| Foto: Juan Manuel Serrano Arce / Getty Images |
(EFE) El entrenador del Celta, Claudio Giráldez, valoró de forma muy positiva el triunfo de su equipo en Mendizorroza y destacó el rendimiento colectivo mostrado en un encuentro que calificó como “muy serio” en el que fueron “justos vencedores”.
El técnico subrayó que su equipo está logrando ser “más certero fuera de casa” y que esta línea de trabajo puede volver a darles frutos, “como el año pasado”. Giráldez se mostró especialmente satisfecho por dejar la portería a cero: "Lo necesitábamos y sabíamos lo difícil que es ganar aquí”. Para el entrenador, su equipo fue “dominador” durante buena parte del choque y estuvo “más cerca de ganarlo que el rival”.
En ese sentido, insistió en que el Celta atacó “bien en muchos momentos”, mejoró la defensa del juego directo respecto al partido anterior y consiguió mantener el control territorial que buscaban. “Hemos manejado muy bien la pelota en los primeros 25 minutos y hemos sido capaces de correr en los minutos finales”, manifestó.
El preparador valoró también el nivel defensivo del conjunto celeste al asegurar que lograron “minimizar el número de ataques del rival” gracias a posesiones más largas y pérdidas “en zonas que nos interesaban”. A su juicio, estas claves explican que el Celta estuviera “muy lejos de su portería siempre que pudo”.
Giráldez dedicó además un mensaje especial al ambiente vivido en Mendizorroza, un estadio que consideró casi “como una segunda casa”. “Tenemos muy buena comunión con la afición del Alavés y es un auténtico placer competir aquí”, afirmó.
El entrenador destacó el comportamiento de ambas aficiones y definió el choque como “un partido noble con dos equipos que quieren mantener el control”.
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