El Celta juega mañana ante la Unión Deportiva Las Palmas un partido decisivo, pero no será el único encuentro al que tendrá que estar atento el celtismo, ya que el mismo sábado el Cádiz visitará Montilivi para medirse al Girona.
Desde el club, tanto técnicos como jugadores, piden centrarse en el partido del Celta, que es lógico y lo que deben hacer ellos, pero es inevitable que la afición siga con cierto miedo los encuentros de los rivales. La jornada puede ser muy buena, buena, regular o muy mala en función de la combinación de los dos resultados.
El escenario puede cambiar en función de lo que pase en estos dos partidos. Si el Celta gana y el Cádiz pierde la distancia será de 6 puntos, pero si el Celta pierde y el Cádiz logra derrotar al Girona estarán igualados al final de la jornada. El cambio entre ambas combinaciones es brutal, y por eso es tan importante el partido de esta jornada ante la UD Las Palmas, porque además el Celta tiene la ventaja de jugar primero, por lo que puede presionar al Cádiz antes de su encuentro, y de paso también a los rivales que están con 31 o 32 puntos. Del mismo modo, en caso de perder o empatar ante los canarios el efecto puede ser el contrario.
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