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| Foto: Pablo Hernández / Faro de Vigo |
El Celta B sigue sin ganar como local, y los tres partidos que ha disputado esta temporada se han saldado con derrota. A comienzos de curso se rumoreó con la posibilidad de que el filial céltico disputase todos sus encuentros como local en Balaídos, algo que no se ha cumplido, ya que hasta la fecha de los cuatro partidos en Vigo solo uno se jugó en el estadio del primer equipo.
Ese partido fue especial por tratarse de un derbi ante el Deportivo, que atrae muchos más espectadores que un encuentro normal. El técnico del filial, Claudio Giráldez, lamentó esta circunstancia en declaraciones recogidas por La Voz de Galicia: “Cuanto más grande es el escenario, más nos favorece. En este caso las conclusiones son claras; llevamos tres derrotas, y las tres en este campo”, explicó al final del partido ante el Mérida.
El preparador porriñés también se quejó del estado del césped, que estaba realmente mal en alguna zona: “Jugamos en escenario en el que hay muchas piernas alrededor. Desde fuera se ve más fácil, pero el campo no te permite estar cómodo”, señaló, aunque no quiso que el estadio o el césped sirviese como excusa para justificar el resultado.
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