Aspas reina también en América


Foto: RC Celta

A Iago Aspas se le suele atribuir un mal arranque de temporada. Es una afirmación que está a caballo entre la media verdad y la leyenda urbana, aunque como suele decir él, al final de la temporada saca la libretita con los números, y siempre son buenos. 

El caso es que en esta pretemporada ha arrancado a un gran nivel. El moañés se ha convertido en el único jugador capaz de crear peligro en los primeros amistosos del verano. Y esto tiene su parte positiva, por ver en buena forma al jugador franquicia del equipo, y su parte negativa por el escaso acompañamiento que ha tenido. 

Analizando los partidos ante Pumas y Earthquakes, el moañés ha protagonizado todas las ocasiones del Celta. Las que acabaron en gol, que fueron una por partido, y las que no. Ante Pumas el equipo de Coudet dispuso de tres ocasiones, las tres en las botas o la cabeza del canterano, y esta madrugada otro tanto de la mismo, aunque conviene darle el mérito a Baeza de forzar el penalti que acabó suponiendo el gol céltico. En la segunda mitad la mejor ocasión la volvió a protagonizar Aspas con un inteligente lanzamiento de falta que se estrelló en el poste.  Hay otra ocasión con un centro chut que remata forzado Aspas y poco más. Escaso bagaje en dos partidos que no  permitirán sacar demasiadas conclusiones, como suele suceder en este tipo de choques. 

Cierto es que la plantilla está a medio hacer, y que gran parte de los refuerzos que faltan se centran precisamente en la zona de vanguardia, donde ahora mismo Aspas es el único delantero puro. Le han acompañado en estos partidos Miguel Baeza, que pareció convencer más a Coudet que Swedberg, que también jugó en punta unos minutos ante Pumas. Además también contó con Miguel Rodríguez, aunque entendemos que el sitio del joven ariete es el filial. 

En los próximos días deberían ir llegando fichajes para la zona ofensivas. Carles Pérez, si se confirma su llegada, puede ser una incorporación más que interesante, y falta ese delantero en el que el Celta echará el resto como acompañante habitual de Aspas. Se habla de Borja Mayoral, aunque veremos si el club vigués puede permitirse ese desembolso. En todo caso, lo cierto es que a día de hoy, las opciones ofensivas del Celta son bastante escasas y eso obliga a Aspas a multiplicarse en ataque para generar peligro. 

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