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| Foto: Xoan Carlos Gil/La Voz de Galicia |
Pues se ha cerrado uno de los mercados más extraños con un fin de fiesta a la altura de lo que ha sido para el Celta. Todo el celtismo esperaba la llegada de algún refuerzo en el último día de mercado, y lejos de producirse esta llegada, hemos perdido a un efectivo, Álvaro Vadillo, que recalará cedido en el Espanyol, con la característica de que el andaluz había sido uno de los escasos refuerzos que llegaron en este verano.
Así pues el mercado para el Celta se resume en las llegadas de Renato Tapia y Miguel Baeza, la continuidad de Murillo, que estaba cedido la pasada temporada, igual que esta por cierto, y muchas salidas.
A día de hoy el Celta tiene dos delanteros centros menos que al final de la pasada temporada, tras la marcha de Smolov y el Toro Fernández. No tiene a Rafinha, sustituido por Miguel Baeza, y ha cambiado a Tapia por Bradaric, aún siendo jugadores de perfil distinto. Ha vuelto Emre Mor, después de sus cesiones en Galatasaray y Olympiacos, y se ha marchado Sisto, traspasado al Midtjylland.
¿Se ha cerrado el mercado para el Celta?
Sí, en lo relativo a jugadores con contrato en vigor, pero aún hay opciones de reforzar el equipo con futbolistas que no tengan equipo antes del cierre del mercado, por ahí podría encontrar el equipo celeste una segunda oportunidad, si es que realmente está interesado en ello, por supuesto, aunque es realmente complicado buscar gangas en este mercado.
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