Se ha terminado la temporada y llega el momento de hacer balance, especialmente en la sede de Príncipe, donde la dirección deportiva y el club trabajan para confeccionar la plantilla de la próxima temporada.
Lo primero que debe decidir el club es con qué jugadores se va a quedar y cuáles no, especialmente entre los jugadores cedidos. La idea hace unas semanas era pujar por Murillo y Rafinha, pero veremos si el club en este momento mantiene esa idea. Los que parece que no seguirán son Smolov, Bradaric y Pape Cheikh, cuyo futuro parece estar lejos de Vigo.
Además debe resolver el futuro de jugadores como Brais Méndez, cuyo contrato expira el 30 de junio de 2021. Si no hay acuerdo habrá que ver cuál es la decisión del club respecto a su continuidad. Otra de las cuestiones pendientes es saber lo que va a pasar con los jugadores cedidos en otros clubes. Ninguno de ellos cuenta para el club, y especialmente problemático es el caso de Emre Mor, por quien el Celta intentará sacar algo de rédito económico para recuperar parte de la inversión.
Por otro lado hay varios jugadores que suenan con fuerza para reforzar al Celta. Álvaro Vadillo y Renato Tapia pueden convertirse en los primeros fichajes, ahora que se ha confirmado la permanencia del Celta en Primera División. También será necesario reforzar la portería, dado que Rubén Blanco y Sergio Álvarez estarán lesionados varios meses. Diego López es un habitual a la hora de hablar de rumores relacionados con la portería, así que es posible que sea uno de los candidatos que baraja el club.
Óscar García comentó ayer tras el partido que su intención era ayudar en la confección de la plantilla, veremos hasta qué punto lo hace y si continúa al frente del banquillo celeste tras el decepcionante final de temporada. Con Óscar o sin él, es evidente que Felipe Miñambres y el club tienen mucho trabajo por delante.
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