Hay estadios, que sin saber muy bien por qué, son malditos para algunos equipos. En el caso del Celta uno de los estadios más temibles cada temporada el Coliséum Alfonso Pérez. Y eso que la historia es reciente, ya que ambos clubes no coincidieron en la misma categoría hasta la Temporada 2005-06, pero ha sido suficiente para crear una maldición de nuevo cuño que no se debe obviar.
El histórico de enfrentamientos entre ambos clubes en la ciudad madrileña es temible. El Celta solo ha podido rascar un empate y una victoria en los 8 partidos que ha disputado en Getafe. El empate llegó en su primera visita, en la jornada 19 de la Temporada 2005-06, con gol de Ángel, para contrarrestar el que previamente había marcado Gavilán.
Después de cuatro derrotas consecutivas, el Celta se impuso con un gol de Nolito en la jornada 26 de la Temporada 2015-16. La única vez en la que se fue del Coliseum con la portería a cero. Las dos siguientes visitas, que han sido las últimas, se han saldado con sendas derrotas: 3-0, y 3-1. El balance de goles también es temible: 5 a favor, y 15 en contra. Además los celestes nunca han marcado más de 1 gol, y se quedaron a 0 en tres ocasiones.
Pero además de estos datos, ya de por sí terribles, pesa sobre el estadio otra maldición, que suele dejar a los entrenadores al borde del despido en algunos casos, y con la destitución en otros. Paco Herrera perdió su trabajo en la Temporada 2012-13 tras caer en Getafe. En la siguiente temporada, Luis Enrique decidió rotar a todo el equipo en un partido entre semana, cayendo claramente derrotado y quedando su puesto en entredicho.
Más complicado lo tuvo Berizzo, que cayó en la Temporada 2014-15, culminando una racha de un punto de 30 posibles. Su despido parecía seguro, y se habló mucho durante toda la semana, pero el club decidió darle otra oportunidad, lo que acabó siendo un gran acierto.
La temporada pasada también fue desastrosa, con la expulsión de Maxi por protestar y aplaudir, viendo dos tarjetas en un segundo. Miguel Cardoso también quedó al borde de la destitución, que se produciría un par de semanas después.
Con estos precedentes, el Celta viaja este sábado sin Iago Aspas, ante un equipo que ocupa puestos de Champions League. ¿Qué puede salir mal?
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