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| Foto: Sara Gordon |
Una de las grandes novedades en el partido disputado ayer por el Celta fue la presencia en el terreno de juego de Pape Cheikh. El internacional senegalés, a quien Óscar García le levantó el castigo, disputó ayer sus primeros minutos desde que se cerró el mercado de fichajes. El último encuentro de Pape fue el 23 de enero ante el Mirandés en la Copa del Rey.
Después de aquel encuentro se produjo un episodio de indisciplina por parte del centrocampista celeste, por lo que el club decidió desprenderse del futbolista en el mercado de invierno. Llegaron ofertas, pero Pape decidió seguir en el Celta, a pesar de que sabía que contaría poco o nada para el técnico celeste.
Cerrado el mercado y con Pape todavía en el Celta, Óscar anunció que a partir de ese momento sería un jugador más, pero no fue hasta ayer, un mes después del cierre, cuando dispuso de sus primeros minutos, que fueron meramente testimoniales, ya que entró prácticamente en tiempo de descuento. El regreso de Bradaric tras su sanción complica aún más sus opciones de tener oportunidades de aquí al final de la temporada.
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