El Celta firmó un acuerdo con el Olympiakos mediante el cual Emre Mor jugaría cedido hasta final de temporada, con compra obligatoria en el caso de que el internacional turco disputase, al menos, la mitad de los partidos oficiales del equipo griego. Parecía que por fin podría llegar la ansiada salida del turco-danés, pero su comienzo en el Olympiakos no es nada prometedor.
Emre Mor no está contando para el técnico del equipo del Pireo, y solo ha jugado dos encuentros de Copa ante el PAS Lamia, 35 minutos en la ida, y 12 en la vuelta. En ninguno de los dos encuentros aportó goles o asistencias. En los encuentros de la Super Liga sigue inédito después de casi un mes de competición, y de hecho solo entró en la convocatoria del partido ante el Panionios, aunque no gozó de minutos. En el partido de Europa League ante el Arsenal también quedó fuera de la convocatoria.
Olympiakos lidera la clasificación en la liga helena con 63 puntos, 5 más que el PAOK, y ha ganado los cuatro partidos que ha jugado desde que Emre Mor está en Atenas, por lo que parece que lo tendrá complicado para entrar en el equipo. En el último encuentro de Liga el propio futbolista indicó en las redes sociales que se quedaba fuera por una lesión muscular. El talentoso extremo sigue tirando por la borda su carrera y no parece que sea capaz de remontar la situación. El Celta se enfrenta a las pérdidas de una apuesta de 13 millones de euros que el tiempo está demostrando ruinosa.
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