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| Foto: LOF |
Jeison Murillo disputó ayer sus primeros minutos con la camiseta del Celta. El central colombiano fue presentado el pasado jueves y apenas necesitó un par de entrenamientos para entrar en la dinámica del grupo. Óscar García comentó en la previa que era el tipo de central que necesitaba el equipo, y lo demostró dándole la titularidad en su primer partido.
San Mamés no es un estadio fácil para un central, pero Murillo logró salir airoso. Y eso que sus inicios no fueron prometedores, ya que en su primera acción falla un control permitiendo una ocasión del Athletic, pero el zaguero colombiano se repuso y acabó completando un partido interesante, liderando la defensa céltica en los últimos minutos, achicando agua cuando más atacaban los bilbaínos.
No es más que un debut. Ya hemos visto en el pasado reciente a jugadores que sorprendían gratamente en su primer partido y a los que posteriormente se le iban viendo las costuras. Seguramente también pase esto en el caso de Murillo, pero al menos ayer demostró virtudes que le pueden venir muy bien al equipo en lo que resta de temporada. Una de ellas es su capacidad de liderazgo. A pesar de llevar dos días en el equipo se le vio dando instrucciones y ánimos a sus compañeros. Quizás esta sea la mejor virtud que necesite ahora mismo el Celta.
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