Un infiltrado en el banquillo rival


El Granada visitará el próximo domingo Balaídos con un vigués en su banquillo. Diego Martínez, afincado en Andalucía, primero por cuestión de estudios y posteriormente por motivos familiares, es uno de los entrenadores más jóvenes de la categoría, pero cuenta a su espalda con un amplio bagaje en los banquillos. 

Diego Martínez Penas nació en Vigo el 16 de octubre de 1980. Tras jugar durante 9 años en las categorías inferiores del Celta, se marchó a Cádiz para estudiar, y posteriormente a Granada. Compatibilizaba los estudios con el fútbol, pero pronto decidió dirigir su carrera hacia los banquillos. Con apenas 25 años dirigía al Arenas de Armilla, y de ahí dio el salto al Motril, ambos clubes de la provincia de Granada. 

Fue entonces cuando llamó la atención de Monchi, que lo convenció para pasar a forma parte de la estructura del Sevilla, donde vivió grandes años. Entrenó al juvenil, con el que se proclamó campeón de la Copa de Campeones en 2013, precisamente en Vigo y ante el Celta. También entrenó al filial C del conjunto hispalense, y al Sevilla Atlético, con el que logró el ascenso a Segunda División en 2016, y posteriormente la salvación. Además también fue entrenador asistente con el Sevilla que ganó la Europa League. 

Tras su etapa en Sevilla lo llamó Osasuna, en la Temporada 2017-18, y la pasada temporada logró el ascenso a Primera División con el Granada, al que ahora dirige con el objetivo de mantenerlo en la categoría. Estamos ante uno de los técnicos más prometedores de Primera División, un vigués con pasado celeste que el próximo domingo intentará llevarse los tres puntos de Balaídos, el estadio en el que soñaba jugar cuando era un niño. 

0 comentarios:

Publicar un comentario