La baja de Okay fue un dolor de cabeza para Fran Escribá. El preparador celeste le otorgó estatus de titular indiscutible la pasada temporada, y pretende repetir este año, pero una inoportuna e importante lesión del internacional turco con su selección le privó de su concurso durante las cuatro primeras jornadas.
Después de más de tres meses de baja volvió el pasado sábado ante el Atlético de Madrid, un estreno que Escribá valora de forma positiva: “Es un jugador que llevaba cuatro meses sin competir, y en un escenario como el Metropolitano rindió bien. Lo vi un poco falto de ritmo, pero sabe jugar muy bien y posiblemente hubiese podido aguantar más, pero entendí que era el momento de que entrara Pape, que lo hizo muy bien. No lo está aún, pero está cerca de su mejor nivel”, señaló,
En principio se espera que hoy sea titular ante el Espanyol, para seguir cogiendo ritmo de competición y acercándose a ese nivel del que habla el entrenador céltico. El próximo domingo en Eibar es uno de los candidatos a quedarse en el banquillo debido a las rotaciones.
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