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| Foto: Marta G. Brea/Faro de Vigo |
Que la temporada del Celta es decepcionante es algo que más o menos todos tenemos claro. Cuando comenzó el curso la aspiración era pelear por Europa. No era una obligación, pero sí un objetivo que se pretendía alcanzar. A diez jornadas del final nos conformaríamos con una temporada como la del año pasado, en tierra de nadie.
Lamentablemente no es así, y el Celta está ahora mismo inmerso en puestos de descenso, con cuatro puntos de desventaja sobre Villarreal y Valladolid. Una situación bastante complicada que es todavía más dura si tenemos en cuenta que por plantilla debería estar mucho más arriba.
Un estudio del medio Estadio Deportivo sitúa al Celta como la octava mejor plantilla de Primer División por su valor de mercado, que alcanzar los 219,7 millones de euros, superior incluso al del Villarreal, que es el décimo en esta clasificación con 192,5 millones de euros.
Además, la diferencia con los rivales directos, con la excepción del Villarreal, es tremenda: Real Valladolid (63,6 millones), Rayo Vallecano (71,3) y Huesca (46,8) son plantillas claramente inferiores en lo relativo al valor de mercado. Todo teórico, ya que lo que realmente importa es lo mostrado sobre el terreno de juego, y ahí los jugadores del Celta están mostrando muy poco, especialmente tras la lesión de Iago Aspas.
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