Augusto: "El Celta tiene una parte de mi corazón"


Augusto, recibiendo el Manuel de Castro (Foto: Marta Grande)
En el mercado de invierno de la Temporada 2015-16 se produjo una de las salidas más traumáticas de los últimos tiempos cuando Augusto Fernández, por entonces capitán del equipo, abandonaba Vigo para fichar por el Atlético de Madrid. El futbolista argentino fue muy criticado por ese movimiento, especialmente por ser el capitán del equipo, y un jugador fundamental en los esquemas de Berizzo. 

Para situarnos tendríamos que viajar a aquel famoso partido ante el Córdoba en el que el técnico argentino se jugaba el puesto tras 10 partidos sin conocer la victoria. Entonces decidió apostar por Augusto como mediocentro defensivo, una medida que a muchos pareció una locura y que acabó siendo clave para el equipo. 

Con Augusto como una de las principales referencias de aquel equipo llegó el Atlético de Madrid dispuesto a hacerse con su fichaje por la lesión de Thiago. Y se lo llevó, por una cantidad realmente baja. El futbolista siempre ha dicho que aquella fue una decisión muy difícil, y ayer volvió a recordarlo en el programa “Ao Contraataque” de la Radio Galega. 

“Mis  niñas nacieron ahí. Vigo siempre estará marcado en mi vida, más allá del fútbol”, comentó, y a continuación explicó los motivos de su marcha: “A mí, con 29 años, me apareció un club como el Atlético de Madrid. Hice lo correcto. En lo deportivo me salió bien porque a los tres meses estaba de vuelta en la selección, ya que hacía un año y medio que no estaba. Al tiempo me encuentro jugando los partidos decisivos de la Champions contra el Barcelona o el Bayern de Munich, incluso llegué a jugar la final de la Champions”. 

El argentino tuvo palabras de cariño para el Celta: “Valoro mucho al Celta, me doy cuenta cuando estoy viendo un partido y me encuentro haciendo fuerza por el Celta en sí, independiente de que hay muchos chicos nuevos que no conozco. El Celta tiene una parte de mi corazón, tanto en lo futbolístico como en la vida, que me ha marcado. Mis dos hijas son viguesas y siempre tendré un rinconcito para Galicia en mi corazón”, destacó, añadiendo que no se pierde “un partido. En China teniendo a Edu Domínguez y a su hijo, que son muy celtistas, no paramos de hablar del Celta”, finalizó. 

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