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| Foto: RC Celta |
Al margen de los fichajes, Maxi Gómez fue el último jugador del Celta en incorporarse a los entrenamientos. Fue el pasado lunes cuando pasó el pertinente reconocimiento médico antes de comenzar a entrenar con el equipo y viajar a Inglaterra para los partidos amistosos ante Southampton y Fulham.
El pasado miércoles estuvo en el banquillo aunque no disputó ningún minuto ya que necesita alguna sesión de entrenamiento más con sus compañeros, en algunos casos nuevos. Veremos si mañana está para jugar, mientras la rumorología en torno a su futuro se ha disparado en las últimas horas con una supuesta oferta de la Premier League. Primero sería su cláusula de rescisión y posteriormente fueron 30 millones de euros, ofrecidos por el West Ham y rechazados por el Celta.
Desde que llegó al Celta y comenzó a rendir desde el primer partido ha sido habitual que lo relacionen con equipos importantes o con mucho dinero. El jugador, a pesar de su juventud, siempre ha exhibido una madurez digna de encomio, mostrándose tranquilo y hablando siempre en clave celeste. Todo un ejemplo para otros de como comportarse ante la prensa, aunque todos entendamos que como es profesional que es buscará el equipo que más le convenga a sus intereses.
Después de casi tres meses sin jugar un partido con el Celta, y dando mucho que hablar sobre una posible salida a varios equipos, llega el momento de que hable sobre el terreno de juego, que es donde mejor se siente. Tal vez sea mañana o tal vez ante el Mainz dentro de unos días. Pero hablará.
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