Alberto Solís ve la luz al final del túnel


La temporada que acaba de finalizar ha sido especialmente dura para Roberto Solís, futbolista del filial que se lesionó de gravedad. El andaluz se rompió el ligamento cruzado, y ha estado siete largos meses de baja antes de obtener el alta médica, lo que le permitirá irse de vacaciones pensando ya en el regreso al trabajo el próximo mes de julio. 

“Después de muchos meses de trabajo, por fin puedo decir que tengo el alta médica. Toca disfrutar de las vacaciones y llegar en la mejor forma posible a la pretemporada. Muy agradecido a todas las personas que han estado a mi lado en este proceso de recuperación", explicó en un tuit publicado este jueves. 

Solís llegó al Celta para enrolarse en el equipo juvenil. Procedía del Sevilla, y fue un fichaje de postín ya que se trataba de un futbolista que había sido internacional en categorías inferiores. La pasada temporada debutó con el filial, y este año pasó a formar parte del segundo equipo del Celta, aunque una inoportuna lesión frenó su progresión. 

0 comentarios:

Publicar un comentario