La jugada polémica del partido llegó con el penalti cometido por Keylor Navas sobre Iago Aspas. Balaídos pedía la expulsión del jugador por la acción, aunque bajo mi punto de vista creo que es correcta la amarilla, ya que el regate era hacia fuera. En todo caso, una vez lanzado el penalti, sí debió ser expulsado el tico.
En el momento en el que impactó el balón Aspas, Keylor Navas estaba adelantado unos dos metros, con lo que el penalti debería ser repetido y el guardameta tendría que ver una tarjeta amarilla por adelantarse, con lo que sería expulsado. Pocos árbitros se atreven a pitar eso y menos si el portero es del Real Madrid. El caso es que el gol no subió al marcador y el Madrid siguió jugando con 11 de forma injusta.
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