Ha sido un día duro el de hoy. Normalmente, el Celta vive totalmente ajeno al circo mediático que tienen montado en Madrid. Cada día, ocho o diez forofos disfrazados de periodista se tiran los trastos unos a otros mientras el país empieza a dormir. Hasta ahí todo bien. Normalmente al Celta ni lo mentan, y si lo hacen siempre es con esa condescendencia con la que suelen tratar a los huérfanos.
No se meten con el Celta, tampoco le prestan mayor atención. Tal vez eso sea la felicidad. Y cuando digo que no se meten con el Celta ni le prestan mayor atención, me refiero a que no lo hacen cuando juega contra el Leganés o cuando juega con el Real Madrid. Puede ser que el Celta elimine en la Copa al todopoderoso equipo blanco, que tampoco hablarán del Celta ni le prestarán mayor atención.
Pero hoy sí. Toda la caverna mediática en masa se ha dedicado durante toda la tarde de este sábado a insinuar ciertas cosas, o atacar directamente al Celta. Los medios nacionales -madrileños quería decir- han estado todo el día hablando del Celta, y eso es un auténtico peligro. Cuando tienen que hablar de este tipo de equipos, a los medios se les suelen ver las costuras. Hasta en el Canal 0, que debería heredar la profesionalidad de Canal +, ha confundido Vigo con A Coruña. Y tampoco es que importe mucho. En realidad han acertado una de tres. Enhorabuena al que supo que Ferrol estaba ahí.
Qué decir de Josep Pedrerol, uno de los creadores y precursores del fútbol telebasura que reina en las cadenas de televisión. El bueno de Pedrerol pedía en su cuenta de Twitter que se arreglase la cubierta, y dejaba un Tuit en el que tal vez pretendía insinuar algo. Pues no, señor Pedrerol, no se juega porque la ley impide que se realicen trabajos en altura si no se garantizan velocidades del viento inferiores a 40 kilómetros por hora de forma continuada.
Otros iluminados proponen que se aplace el partido de semifinales de la Copa del Rey, y que ese día se juegue este encuentro, porque lo único que les importa es el Madrid, y les da igual que muchos celtistas tengan planificado y cerrado un viaje a Vitoria, y que el Celta también está en competiciones europeas, y tiene un problema de fechas similar al del Real Madrid. Y se quedan tan anchos.
En fin. Ha sido un día duro. Probablemente mañana no se vuelvan a acordar de nosotros, y viviremos tranquilos. Volverá la calma y seremos un poco más felices. El único que echará de menos días como estos será Abel Caballero, pero lo que ha disfrutado hoy ya no se lo quita nadie. Y ojo, que ha estado perfecto el bueno del Alcalde.
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