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| Foto: Jorge Landín |
Como si de un homenaje al nuevo patrocinador principal del club -Estrella Galicia 0.0- el Celta ha encadenado cinco partidos consecutivos llegando con ese marcador, empate a cero, al descanso. Es algo realmente complicado, incluso por la entidad de los rivales a los que se ha enfrentado, ya que ante Real Madrid y Atlético consiguió llegar al descanso sin encajar ningún gol, y por supuesto sin marcarlo.
En esta temporada, al menos en la Liga, todo se desata en las segundas mitades, con la salvedad del partido de El Sadar, para regocijo de El Día Después, siempre llegan los goles en la reanudación, esos goles que nunca quieren hacer acto de presencia en las primeras mitades.
Así, el promedio de goles por partido en las primeras partes del Celta es de 0, y en las segundas es de 2,20, una cifra que no está mal para una parte de 45 minutos. Habría que revisar los libros de historia para revisar si se había producido un inicio de temporada semejante, o incluso una racha de partidos en los que al descanso el marcador indicase un 0-0 durante cinco partidos consecutivos. Veremos si la racha se rompe ante el Espanyol.
A estos encuentros hay que sumar el de la última jornada de la pasada temporada, en el Vicente Calderón, partido al que también se llegó con empate a cero, también con Sergio Álvarez debajo de los tres palos.
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