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| Foto: Atlántico Diario |
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, no quiere polémicas en público con el Celta, y refrendó el comunicado emitido ayer por el club vigués con respecto a las obras en Balaídos, calificando a Mouriño y a la entidad que preside como “sensatos”. El edil confirmó que ante el Leganés solo estará abierta Tribuna Baja, y que ante el Atlético de Madrid estarán las dos gradas operativas.
Caballero dio la razón al Celta, y recordó que no entendía que “una obra que va a durar cien años se critique por una semana de retraso. Es el mejor estadio que nunca pudo hacer esta ciudad y es una obra pagada desde lo público”, afirmó el socialista sobre la financiación de los trabajos de mejora del estadio.
Por su parte, Miguel Fidalgo, concejal de Partido Popular, muy crítico con las obras, criticó la “absoluta indefinición del proyecto”, argumentando que “no se sabe nada de la reforma de las gradas de Río, Marcador y Gol”, y apuntó que “la nota del Celta no despeja las dudas de los aficionados”.
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