 |
| Foto: Xoan Carlos Gil |
Sergio Álvarez no está viviendo una temporada a la altura de la anterior, que llegó a ser estratosférica en diversas fases de la temporada. Sus últimas actuaciones han sido muy discutidas por un sector de la afición, que espera más de un guardameta que el año pasado mostró un excelente nivel.
Por eso, el partido de ayer le sentará muy bien de cara al futuro más inmediato. Sergio resolvió bien tres manos a manos con Bakambú, de los cuales dos de ellos revestían especial dificultad. Cierto es que el delantero amarillo no realizó el disparo de su vida, pearo Sergio supo ocupar la suficiente portería como para confundir al delantero rival.
Berizzo temía las contras del Villarreal, y la defensa se encargó de cortarlas casi todas, pero algunas pasaron porque es imposible evitarlo. Fue ahí cuando llegó el momento inspirador de Sergio evitando males mayores. Si alguna de esas acciones acabase en gol, siendo aún la primera parte, el partido habría sido muy diferente.
0 comments:
Publicar un comentario