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| Foto: Xoan Carlos Gil |
Balaídos vivió esta noche un auténtico partidazo de fútbol de verdad, con un Celta que mostró una apuesta bellísima, sin ceder ni un ápice en sus intenciones de buscar la meta contraria con independencia del resultado. El Madrid, con un presupuesto veinte veces superior al Celta tuvo más pegada -otra cosa sería extraña- y se llevó el partido jugando a la contra y sustituyendo delanteros por defensas en la recta final del partido.
Y es que a Berizzo le da igual el rival que tenga enfrente. Ha encontrado su equipo y su esquema y morirá con él. Hoy repitió el once de los tres últimos partidos, con Augusto y Krohn-Dehli en el pivote, Orellana de enganche, y arriba Santi Mina, Nolito y Larrivey. Seis jugadores de ataque ante un equipo que te mata a la contra. Una temeridad para un equipo que no cuente con el fútbol que lleva el Celta en sus botas.
La puesta en escena de los vigueses fue la prevista, pero el Madrid también comenzó el partido con mucha agresividad, así que los primeros instantes fueron de tanteo hasta que el Celta aceleró el ritmo y comenzó a incomodar a los madrileños con su presión. Además, también encontró gol pronto en las botas de Nolito, que maniobró muy bien dentro del área rival y batió con elegancia a Casillas.
El gol debería servir para contemporizar, pero el Celta no sabe ni quiere hacerlo. Y eso a veces lo puede aprovechar el rival, que en pocos minutos se puso por delante en el marcador, primero con un gol de Kroos, y posteriormente con una acción entre James y Chicharito, resuelto por el mexicano con el 1-2.
El Madrid se había repuesto bien del tanto inicial, y el Celta también supo hacerlo de la remontada blanca. A los 27 minutos maravilloso pase de Orellana a Santi Mina. El canterano se planta ante Casillas y envía el disparo al palo recogiendo su propia rechace y enviando el balón al fondo de las mallas.
Por entonces, Balaídos estaba entregado al Celta, y los de Berizzo se desbocaron en la recta final de la primera mitad. Hubo llegadas, algún uy, y sobre todo dominio de juego en esta fase de partido, pero también se descuidó en exceso la espalda. Lo pudo aprovechar Ronaldo, que disparó al palo, y finalmente sí lo hizo James, con cierta fortuna, ya que su disparo tropezó en Fontàs y despistó a Sergio.
Así se llegaba al descanso, pero la segunda mitad aún proporcionaría más motivos para el orgullo de la afición céltica. El conjunto celeste salió a por todas tras el descanso y encerró al Madrid en su área. El balón estaba permanentemente en campo contrario. El Celta, con su presupuesto de 30 millones, ponía contra las cuerdas a un club con un presupuesto de más de 600 millones.
Y en medio de ese dominio abrumador llegó una nueva acción a la contra con un gran pase de Sergio Ramos que aprovechó Chicharito para poner el 2-4, que ya sería definitivo. De ahí al final del partido Ancelotti retiró delanteros para meter defensas, y el árbitro se empeñó en parar todo lo posible el partido. Y ni con esas lograron que el Celta se rindiese.
No pudo ser en esta ocasión. El Celta no obtuvo puntos, pero le servirá para seguir creyendo en una fórmula que nos puede dar muchas alegrías de aquí al final de la temporada. El próximo miércoles visita Balaídos el Málaga, en un encuentro que cobra vital importancia tras los resultados de este fin de semana. Pero eso será otra historia.
Ficha técnica
Celta: Sergio, Hugo Mallo, Cabral, Fontás, Jonny, Augusto, Krohn-Dehli, Santi Mina (Pablo Hernández, min.74), Orellana (Bongonda, min.69), Nolito y Larrivey (Charles, min.73)
Madrid: Casillas, Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Marcelo, Kroos, Illarra, Isco (Jesé, min.81), James Rodríguez (Arbeloa, min.84), Ronaldo y Chicharito (Pepe, min.74)
Goles: 1-0, min.9: Nolito; 1.1, min.15: Kroos; 1-2, min.23: Chicharito; 2-2, min.27: Santi Mina; 2-3, min.43: James; 2-4, min.68: Chicharito
Árbitro: Pérez Montero, del comité andaluz, amonestó a Jonny, Sergio Ramos
Campo: Balaídos, 25.274 espectadores
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