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| Foto: Miguel Vidal |
El Celta ha logrado una brillantísima victoria ante el Atlético de Madrid. El vigente campeón de Liga, que además venía de golear al actual líder. Credenciales suficientes para ser conscientes de la hazaña lograda por el Celta esta noche, cimentada en un claro dominio de juego durante la primera mitad, y en una desconocida efectividad durante la segunda. Tres puntos que lanzan al Celta ante uno de los mejores equipos de Europa.
Berizzo era consciente de la dificultad del envite, así que puso toda la carne en el asador desde el principio. Adelantó la posición de Augusto, volviendo Radoja al mediocentro, y puso al tridente habitual, con Nolito, Orellana y Larrivey. Las primeras impresiones del Celta fueron las que están marcando la presente temporada: Dominio, posesión y poca pegada arriba.
El Celta lo hacía todo bien, y además bonito, pero fallaba arriba. Nolito y Orellana volvían loca a la defensa atlética, especialmente el chileno que tuvo una media hora primorosa. Era un domino más efectista que efectivo, que tuvo al cuarto de hora el primer disparo, por mediación de Krohn-Dehli, que no ajustó su tiro con la zurda.
Dos minutos después, Nolito se disfrazó de Laudrup para realizar una bellísima jugada sobre la línea de fondo, llevándose a tres jugadores pero sin precisar el pase de la muerte. Unos minutos más tarde fue Orellana quién lo intentó, también sobre la línea de fondo, pero su centro chut lo atrapó Moyá sin complicaciones.
Simeone, consciente del bañó táctico al que le estaba sometiendo Berizzo, comenzó a mover ficha, retirando del terreno de juego a Tiago para dar entrada al ex céltico Mario Suárez. El cambio no mejoró al conjunto colchonero, pero el Celta iba perdiendo la frescura de su exhuberante comienzo. En la recta final de la primera parte, apenas tuvo ocasiones el Celta. Tampoco el Atlético, que solo se acercó a la meta de Sergio con un disparo lejano de Mandzukic. Al descanso se llegó con una última llegada del Celta, con disparo desviado de Nolito.
Se esperaba un Atlético desatado en la segunda mitad. Simeone, consciente de que tenía perdida la batalla del centro del campo, dio entrada a Cani en lugar de Torres. El partido se igualó, porque al Celta ya le costaba más tener el balón, pero cuando falló la combinación emergió una desconocida efectividad. A los diez minutos de la segunda mitad, Nolito es derribado dentro del área por Mario Suárez y Martínez Munuera señaló el punto de penalty. No falló el “10” del Celta.
Con el gol de ventaja, el Celta plegó las velas ante el empuje atlético, que pudo igualar la contienda, pero entonces emergió la figura de Sergio Álvarez, que ya amargó a los colchoneros en el partido de ida. El de Catoira estuvo providencial en momentos clave. Al cuarto de hora se hizo inmenso ante Griezmann, a quien le sacó otro balón con marchamo de gol en el 21 de la segunda mitad.
El Celta no renunciaba al ataque, y entre estas dos jugadas del francés, pudo anotar el segundo tras una gran jugada de Nolito que pone en bandeja el segundo a Larrivey, pero el argentino, con la mira desviada en los últimos encuentros, falló lo más fácil. El Celta se rehizo poco a poco, apoyado en las paradas salvadoras de Sergio y en las desesperación del Atlético, adelantó filas y buscó el segundo aprovechando los espacios que dejaba la zaga atlética.
Nolito y Orellana se convirtieron en la peor pesadilla para Moyá, y sería el chileno, tras una gran jugada culminada con un pase brillante de Krohn-Dehli, el que batiría al meta colchonera poniendo tierra de por medio en el partido. El gol sentenció el partido, aunque el Atlético parecía tener todavía resuello. Los de Simeone lo intentaban, pidieron penalty de Fontàs a Mandzukic, que pudo ser, pero en la práctica apenas inquietaron a Sergio.
Berizzo dio entrada a Pablo Hernández, que dotó al centro del campo de mayor consistencia, e incluso pudo marcar el tercero tras una gran acción de Orellana, cuyo golpeo fue atajado de forma felina por Moyá. Ya no había tiempo para más. El Celta cierra brillantemente un periodo clave para su futuro, y llega al derbi con tranquilidad en el aspecto clasificatorio. Pero eso será otra historia.
Ficha técnica
Celta: Sergio, Sergi Gómez, Cabral, Fontás, Jonny, Radoja, Augusto, Krohn-Dehli (Álex López, min.89), Orellana (Santi Mina, min.90), Nolito y Larrivey (Pablo Hernández, min.75)
Atlético: Moyá, Juanfran, Godín, Miranda, Siqueira, Tiago (Mario Suárez, min.33), Gabi (Jiménez, min.71), Saúl, Torres (Cani, min.46), Griezmann y Mandzukic
Goles: 1-0, min.13: Nolito; 2-0, min.71: Orellana
Árbitro: Martínez Munuera, del comité valenciano. Amonestó a Godín, Cani
Campo: Balaídos (22.090 espectadores)
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