![]() |
Foto: marca.com |
Esa sensación provocó un cambio en la gestión de los cambios y de los últimos minutos de juego por parte del entrenador céltico, que en los dos siguientes choques optó por realizar cambios eminentemente defensivos para tratar de aferrarse al empate en el Calderón y la victoria en el derbi. La apuesta ha salido bien en cuanto a resultados, aunque bien es cierto porque Sergio detuvo el penalti de Medunjanin el pasado martes.
Los dos futbolistas que han personalizado este giro conservador en los últimos minutos de los partidos son Jonny Castro y Sergi Gómez. El catalán, además, ejerciendo de pivote defensivo con Borja Fernández en el banquillo y cuando su puesto natural es el de central. El canterano culé asume con resignación marcial los designios de su entrenador: "He intentado ayudar al equipo en la situación en la que fuera. Sí que es verdad que no han sido nada fáciles porque teníamos que mantener el resultado, pero creo que he cumplido bien. Yo vine aquí a ayudar al máximo y si tiene que ser vestido de portero, pues vale".
Tener que moverse en un puesto que, de salida, no es el suyo específico no molesta a Sergi Gómez. "Me encuentro bien de pivote. Es una posición en la que he jugado poco pero me ha dado consejos el míster y si alguna vez tengo que ser una solución ahí, perfecto", asume. E insiste en que "mi posición es la de central, pero si me toca adaptarme a otra posición por circunstancias lo voy a hacer". El catalán desvela lo que Berizzo le pidió al salir al campo en los dos últimos partidos: "Más que nada concentración, intentar evitar las contras del equipo rival y ayudar a los centrales".
Con los resultados delante, parece que la apuesta táctica para cerrar los partidos está cumpliendo su cometido, aunque Gómez considera que dicha eficacia debe ponerse en el haber de la actitud del equipo y no de su disposición sobre el campo: "No sé si es sólo por el método. El equipo se ha dado cuenta que en los minutos finales debemos tener mucha más concentración porque se nos han escapado puntos en estos tramos de partido y es importante saber jugar con el resultado y ser conscientes de que no se nos pueden escapar más".
Como se ve, el soldado acepta con fe su nueva labor. Y el forjador de la idea, el que toma las decisiones, explica que estos cambios no se deben a una renuncia en la filosofía ofensiva, sino a un matiz asumible en los minutos finales para no echar por tierra toda la osadía anterior. Así, Berizzo razona que "hago cambios defensivos en el último minuto porque quiero ganar. No tengo intenciones de replegarme más de lo que habitualmente hacemos o de defenderme más cerca de mi portería, no creo en eso. Sí creo que, si Juanfran en la banda derecha del Deportivo se transforma en lateral, ese emparejamiento con Nolito nos puede hacer daño defensivamente. Entonces imaginé Jonny y Planas, faltando ocho minutos de partido. Pero eso no condiciona que el equipo deba replegarse de más".
El entrenador argentino insiste en que "me gusta atacar todo lo que pueda, pero sí me parece que debemos sacarle provecho a tanto dominio y que no se nos escape el haber sido generosos con el partido por defender mal. Si eso conlleva defensores y muchos defensores, habrá muchos defensores".
Yendo a lo concreto, el máximo responsable técnico argumenta la apuesta por Sergi Gómez como pivote defensivo de emergencia utilizada tanto ante el Atlético de Madrid como ante el Deportivo. "Cuando falta poco para el final del partido y el equipo rival mete en el campo gente de ataque, gente alta, como sucedió también en el Calderón, el ingreso de Sergi nos ofrece una gran garantía aérea y un jugador muy agresivo y muy buen defensor para soportar esos minutos. El equipo no cambia su fisonomía sino que cambia una pieza por otra protegiendo defensivamente lo que queda", explica.
Meritocracia y practicidad
De trasfondo, la sensación del técnico de que la falta de puntería pueda pagarse cara en partidos en los que el equipo ha sido dominador: "Quisiera que la generosidad puesta en el ataque tenga más rédito. A veces, en la meritocracia nos ponemos por delante, pero eso hay que hacerlo aterrizar de forma práctica. Porque si no, en cinco minutos todo lo que hiciste se vuelve para atrás".
Atlántico Diario
0 comments:
Publicar un comentario