El celtismo tiene ganas de conocer a Pablo Hernández, el argentino con pasaporte chileno que llegó a Vigo avalado por Berizzo, con el que coincidió en O'Higgins. El centrocampista se estrenó ayer en un partido oficial con la camiseta del Celta tras superar los problemas físicos que le impidieron completar la pretemporada con el resto del grupo.
Berizzo incluyó a Hernández en la lista de 19 convocados para viajar a Córdoba. El técnico descartó a Levy Madinda para sentarse en el banquillo, donde el chileno esperó al minuto ochenta y cinco de juego para debutar. Suplió a Nolito, al que no le gustó el cambio. El fichaje estrella del Celta perdió uno de los primeros balones que tocó, pero pronto se sumó al ritmo vertiginoso con que se disputaron los últimos minutos.
Salió de la defensa con el balón controlado con su pierna izquierda y recibió una falta. Fue muy breve su presencia en el campo pero dejó detalles de la calidad que se le presupone y por la que apostó Berizzo para recomendarlo al Celta. Ahora, Hernández tendrá dos semanas por delante para ponerse a la altura del resto del equipo.
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