Andrés Túñez inició la presente campaña con el objetivo de seguir siendo un futbolista importante en el Celta. Titular la temporada del ascenso y también el curso pasado, ya en Primera División, el central debía ganarse la confianza de Luis Enrique, pero no fue capaz. El técnico asturiano le comunicó en pretemporada que no contaba con él y el canterano tuvo que buscar una salida. Estuvo a punto de irse al Zaragoza de Paco Herrera –cesado recientemente–, pero las negociaciones se rompieron el último día del mercado de verano y Túñez encontró una solución en Jerusalén. Llegó al Beitar motivado por la presencia del ex céltico Haim Revivo en la directiva del club israelí y con el objetivo de disfrutar de una nueva experiencia.
El compostelano debutó en la tercera jornada del campeonato de Israel y fue titular en 23 de los 24 partidos que disputó su equipo hasta el término de la liga regular. Sólo se perdió uno y por sanción. Sin embargo, los resultados no fueron los esperados y el Beitar se quedó fuera de la fase por el título. Obligado a disputar la liguilla de permanencia pero con la salvación asegurada porque se arrastran los resultados de toda la temporada, el club ha decidido ahorrarse parte del salario de algunos de sus futbolistas, entre los que se encuentra Andrés Túñez. El céltico no jugó el primer partido de la liguilla por sanción –fue expulsado en el último encuentro de la fase regular–, pero en los dos siguientes tampoco entró en lista de convocados. El Beitar quiere presionar de este modo al futbolista para que acepte una salida y su futuro puede solucionarse en el plazo de una semana.
Por el momento, el céltico baraja una propuesta de Tailandia, salida que al menos le permitiría seguir acumulando partidos en la recta final de la temporada. No obstante, antes tiene que producirse un acuerdo entre el Beitar y el Celta, que el pasado mes de septiembre sellaron la cesión del futbolista hasta el próximo 30 de junio. El agente de Túñez, Rodrigo Fernández Lovelle, admite conocer lo que está sucediendo en Jerusalén, si bien aclara que el club israelí no le ha comunicado nada oficialmente y no puede buscar otro equipo para su representado hasta que exista el citado acuerdo entre el equipo que posee los derechos del jugador, el Celta, y el conjunto en el que está cedido, el Beitar.
Mientras espera una solución, Andrés cuenta con el apoyo en Israel de su compañero y amigo Jonathan Vila. El porriñés tampoco contaba para Luis Enrique y se unió a Túñez en el mercado de invierno. Desde entonces, se ha convertido en una pieza importante para el conjunto israelí. Desde que debutó, el pasado 19 de enero, Vila acumula once encuentros, incluidos dos de los tres que el Beitar ha disputado en la liguilla de permanencia.
En el caso del porriñés, que está actuando en la posición de mediocentro –tal y como hacía en las categorías inferiores del Celta y en sus primeros años en el primer equipo– , todo parece indicar que completará su periodo de cesión en Israel, a donde llegó con el objetivo de acumular los minutos que se le resistían en Vigo. En verano, como Túñez, se reincorporará al club vigués.
Borja Barreira / Atlántico Diario
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