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| Foto: EFE |
Es, hasta la fecha, el partido más redondo del Celta esta temporada. Al menos, en cuanto a resultado. Hace justo una vuelta liguera, el conjunto vigués visitaba La Rosaleda para enfrentarse al Málaga en una situación delicada, con sólo seis puntos y tras siete jornadas sin haber conseguido una victoria. De hecho, hasta ese momento y a pesar de llevar ya nueve encuentros, únicamente había ganado en su visita al Betis de la segunda jornada. Y el calendario, tras visitar la Costa del Sol, marcaba la llegada a Balaídos de todo un Barcelona. Un 0-5 solventó todos los problemas y convenció a los célticos de que estaban en el buen camino.
Así lo reconoce Álex López, uno de los jugadores más destacados en aquel choque al ser el autor de dos de los cinco tantos celestes. "Hicimos un partido muy, muy serio, jugamos muy bien al fútbol y se dieron dos aspectos fundamentales: no encajamos gol y estuvimos muy acertados de cara a portería". Por todo ellos, el ferrolano no duda en apuntar que "fue un partido perfecto". El momento para disfrutar de una goleada así era el ideal en un equipo todavía en rodaje desde el punto de vista del acoplamiento a las ideas del técnico, Luis Enrique Martínez. "Veníamos de una racha no muy positiva y sabíamos que después nos íbamos a enfrentar al Barça y después otra salida difícil en Sevilla. Fue muy bueno para coger confianza y para reafirmanos en el trabajo que estábamos haciendo. Ese día todo fue positivo", rememora el centrocampista.
En cualquier caso, aclara que aquel contundente triunfo no debe llevar al error de pensar en que este viernes la visita del Málaga será liviana. Entre otras cosas por que "mejoró mucho, se reforzó muy bien en el mercado invernal y es un equipo más sólido. No se va a parecer en nada, porque estamos ya en una fase de la temporada en la que todos nos jugamos mucho", clara el ferrolano.
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