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Foto: Salvador Sas |
Luis Enrique lo comentó en la rueda de prensa previa al choque. El duelo ante el Athletic sería parecido al de Copa en Balaídos. El asturiano también afirmaba que tenía el once claro. Sólo el mal estado del terreno de juego podía alterar sus planes. Al final, el césped aguantó las intensas lluvias y el preparador gijonés realizó su enésima variación de piezas.
El once por el que apostó Luis Enrique tenía cierto parecido al del duelo de ida de la competición del KO. La principal novedad era la presencia de Krohn-Dehli en el pivote defensivo. Los otros cambios con respecto a Granada eran el regreso a la titularidad de Álex López y Santi Mina en detrimento de Nolito y Augusto Fernández. El otro suplente era Oubiña, que no cuajó una buena actuación ni en Los Cármenes ni en el triunfo cosechado ante el Betis en Balaídos.
El Celta recuperaba esa similitud del partido copero. La idea era la misma. Discutirle la posesión al rival y presionar con una intensidad frenética. La sala de máquinas era la misma que la de aquel sábado. Krohn-Dehli, Rafinha y Álex López ya hicieron de las suyas aquel día. El resto de líneas sí guardan variaciones. El primero en la portería. Yoel es indiscutible, al igual que Fontás, que completaba la línea defensiva junto a Cabral, Jony y Hugo Mallo. Por último, el ataque de esta noche tenía a Charles en vez de Nolito, que tuvo su oportunidad en la segunda mitad.
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