La Liga convierte a los aficionados que no pasan por caja en agresores


Durante este fin de semana la LFP estrenó una campaña en televisión encaminada a lucha contra la piratería que seguramente muchos de vosotros habréis visto en los distintos canales que emiten partidos en directo. En ella, entre otros vídeos, se pueden ver imágenes de aficionados de Primera y Segunda División cometiendo faltas y agrediendo a jugadores de sus propios equipos en montajes de partidos celebrados esta temporada. En el caso del Celta, la "víctima" es Nolito, que sufre la falta de una aficionada céltica durante un Celta - Barcelona. 

La campaña está encaminada a concienciar a los aficionados del gran daño que hacen a sus propios clubes cada vez que ven un partido de forma "pirata". Es decir, a través de internet de forma ilegal. Lo cierto es que la campaña, más allá de la anécdota del vídeo que logra lo que toda campaña de Marketing desea, tiene un trasfondo bastante polémico, culpabilizando directamente al aficionado que consume el producto en su casa. 

Sin defender situaciones ilegales, la LFP y los clubes a nivel particular, deberían buscar fórmulas más imaginativas si quieren mantener el negocio que tienen montado. Los horarios, la desigualdad entre los equipos grandes y los demás, los precios, tanto en los estadios como en las plataformas televisivas, o el escaso interés que tiene la liga en el exterior, donde solo dos equipos tienen tirón por lo anteriormente comentado, es lo que realmente hace daño al fútbol. No el chaval o el señor que entra en Roja directa para ver el partido de su equipo.

0 comments:

Publicar un comentario