La idea está clara; su croncreción, no tanto. Tras nueve jornadas de liga, los jugadores del Celta siguen ajustándose al esquema futbolístico del técnico celeste, Luis Enrique Martínez. Y no a la inversa, se advierte. Y eso a pesar de lo que pudiera deducirse del posicionamiento de Borja Oubiña en el último partido ante el Levante, más avanzado en el momento de la salida de balón, sin encajarse entre los dos centrales.
El propio interesado, que dio un nivel muy superior este lunes respecto a los anteriores encuentros, aclara que el cambio es circunstancial y que se debe únicamente a la disposición táctica del rival en suertes, el Levante. 'Son circunstancias. Va a haber partidos para todos. Lo que es la base del equipo siempre es la misma. El otro día la posición fue un poco diferente porque ellos nos dejaban la primera salida sencilla y no había necesidad de jugar más retrasado', comenta Oubiña.
La movilidad de balón del equipo mejoró con el vigués en un puesto de mediocentro más clásica. Pero él aclara que 'el otro día era lo que creíamos que el equipo necesitaba'. Aunque introduce un matiz interesante al añadir que Luis Enrique Martínez los anima a tomar determinaciones sobre la marcha dentro del campo: 'Nos viene diciendo siempre que al final los que tenemos que interpretar las cosas somos los jugadores'. Eso sí, aclara que no es un cambio en lo diseñado desde el comienzo de temporada, ya que 'nos da la misma libertad. El míster lo que te transmite es que hagas lo que tú sientas, dentro de las pautas que te marca'.
En este sentido, considera que las dudas sobre el técnico a día de hoy 'son tópicos por los malos resultados. Quien esté fuera no sabe lo que hacemos aquí dentro y es normal que tenga dudas. Pero tiene conocimientos, trabajo le sobra y energía le sobra. Fuera no se percibe eso, pero dentro sí'.
Santi Alonso / Atlántico Diario
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