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| Foto: Pepe Ortega |
El fútbol de salón ha conquistado a la afición céltica. El fichaje de Luis Enrique suponía continuar con ese estilo futbolístico, así como una clara apuesta por los jugadores formados en la cantera. Ese es el gran anhelo del club vigués en los últimos años. Un deseo que ha dado buen resultado. El Celta ha regresado a Primera División y mantiene ese mismo camino para asentarse en la élite del fútbol español.
Esta temporada, sin embargo, no están llegando los resultados. El peaje de ese "fútbol romántico" está siendo cruel con conjuntos con propuestas similares a la del Celta. De hecho, Rayo Vallecano y Almería acompañan a los vigueses en la zona caliente de la tabla.
El equipo vigués se podría decir que en momentos determinados de este curso ha sido esclavo de su estilo. Su falta de pegada en las últimas jornadas (sólo el tanto de Nolito en el Vicente Calderón) era más que preocupante. Esas seis dianas conseguidas esta temporada comparten un rasgo común. Todas habían sido conseguidas con remates en el área. Seis jugadas con el sello de ese "look futbolístico" que ha ido ganando adeptos en los últimos años.
Al conjunto de Luis Enrique le faltaba un tanto lejano. Un disparo desde lejos de esos que protagonizan los vídeos de los mejores goles de la jornada. Krohn-Dehli opositó a romper este registro ante el Levante. El campo, empapado por la lluvia, invitaba a probar el chut desde media distancia. Sin embargo, el encargado de inaugurar este apartado sería Álex López. El ferrolano, que abrió su cuenta goleadora ante el Espanyol, batió a Willy Caballero en el primer disparo a puerta de los celestes. No fue un obús, pero sí un remate colocado al palo izquierdo de la meta malagueña. Cristiano Ronaldo y compañía sufrieron para batir al arquero argentino. Al "8" celeste le bastaron cinco minutos para derribar la muralla del conjunto que dirige Bernd Schuster. El fútbol de salón enamora, pero el disparo lejano también tiene su encanto. Esperemos que sea el primer de muchos.
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