ALBERTO LIJÓ
Como todos los años llega el momento de evaluar y puntuar a los jugadores del Celta tras la conclusión del campeonato. Este año, los que formamos MoiCeleste analizaremos, uno a uno, a todos los futbolistas para que vosotros le pongáis la nota a su temporada. Gracias a todos por participar.
Carlos Bellvís Llorens, más conocido entre sus compañeros
como “Chispa”, es uno de los miembros del plantel vigués con la etiqueta de
suplente. El valenciano tiene un año más de contrato, no obstante el club tiene
en su mano decidir el futuro del jugador ya que existe una cláusula por la que
puede prescindir de sus servicios este mismo verano.
A lo largo de esta temporada ha contado con muy pocos
minutos viviendo a la sombra de Roberto Lago en el carril izquierdo y teniendo
apariciones esporádicas a pierna cambiada como en el reciente partido contra el
Valladolid por sanción de Jony. Ha sido el cuarto jugador con menos minutos de
entre todos los que estuvieron desde el comienzo de la temporada en Vigo.
De los 818 minutos que disputó en Liga, solamente un
inspiradísimo Jesús Navas consiguió bailarlo. Literalmente. Pero hay que tener
en cuenta lo siguiente y pensar en frío: ¿qué defensa es capaz de frenar a un
Navas enchufado?
A pesar de estas apariciones a cuenta gotas se puede decir
que es un jugador que ha cumplido siempre que ha jugado. Si se le preguntase a
la afición por Bellvís, seguramente el adjetivo que saldría de la boca de todos
es precisamente ese, cumplidor.
Al margen de lo deportivo, Bellvís destaca por su
profesionalidad. Un jugador de esos que no molestan en ningún vestuario. Nunca
levanta la voz, humilde, trabajador y buen compañero. Su bajo salario también
es algo que corre a su favor.
Ante la baja de Lago y la escasez de laterales izquierdos en
el mercado, parece que el Celta tiene en casa la primera piedra para fortalecer
esa posición de cara a la temporada que entra. Su regularidad le avala.
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