El bendito problema de la portería

MARTA G. BREA

Cuando la dirección del Celta se siente a diseñar el equipo de la próxima temporada y repase el balance de futbolistas de los que dispone se encontrará con la duda de qué hacer en la portería. Con la conclusión de la Liga en Segunda, el club recuperará a Yoel, cedido en el Lugo, y que se sumará a un vestuario en el que ya se encuentran Sergio y Rubén Blanco.

La temporada pasada el Celta decidió ceder a Yoel para que continuase adquiriendo experiencia. La incorporación de un portero como Javi Varas relegaba al vigués a la suplencia, por lo que se optó por darle continuidad en Segunda. Desde su llegada a Lugo ha jugado 32 partidos y ha sido el referente de la portería, a pesar de que José Juan ha llegado a jugar diez encuentros. En su momento Quique Setién dijo que quería ver a su segundo portero, con buen juego de pies, aunque en las últimas jornadas Yoel ha recuperado la titularidad.

De hecho, el jugador vigués se erige como el tercer portero que menos encaja en Segunda. Ha recibido 34 goles en 32 partidos. Más allá de los números, Yoel ha dejado en Lugo la sensación de solvencia bajo los palos y de seguir una línea ascendente. En el juego con los pies, quizás su asignatura pendiente, ha avanzado, y, como ejemplo, el partido de hace dos semanas ante el Sabadell, donde uno de los goles nació en la portería, con el pase certero de Yoel a las botas de Óscar.

Curiosidades del fútbol, de los tres porteros que el Celta tiene ahora mismo y que estarían llamados a pelear por la titularidad, Yoel es el único que no ha debutado en Primera. Sergio fue el portero celeste en los partidos ante el Sevilla y el Real Madrid, además de en los encuentros de Copa, y Rubén jugó en Valladolid además de defender la portería en el partido por la salvación ante el Espanyol. Así, y a nivel anecdótico, el joven meta, a sus 17 años, puede presumir de haber debutado en Primera sin encajar. En caso del de Sergio, aunque tiene contrato hasta 2015, el club podría rescindirlo unilateralmente a cambio de una penalización económica.

El debate sobre la portería está candente, sobre todo después de la apoteósica irrupción de Rubén, que asombró por su tranquilidad y buenas intervenciones a pesar de lo que estaba en juego. Aunque lleva tiempo entrenando con el primer equipo, la lógica indicaría que Rubén continuase creciendo y ganando experiencia en el filial, sobre todo si asciende a Segunda B, dejando la lucha por la meta de Primera entre Yoel y Sergio. Aquí, sin embargo, surgiría la tercera vía. El curso pasado, en el regreso a Primera el Celta apostó fuerte por contratar a un portero como Javi Varas que aportase experiencia y garantías bajo los palos. La duda es si el club volverá a hacerlo.

Lorena García Calvo / La Voz de Galicia