El mundo del arbitraje ejemplifica a la perfección lo que es este país en el que nos ha tocado vivir. Un pais en el que los méritos están más relacionados con los contactos, amigos y familia que con el propio talento de los individuos. El reparto arbitral es uno de los claros ejemplos. Sánchez Arminio ha implantado un sistema de cupos que le permite tener contentos a todos los colegios arbitrales de España para ganarse sus votos en las elecciones. Si un vasco desciende, ascenderá otro. Si un madrileño se retira, ascenderá otro.
Así las cosas llegamos a Cantabria, donde se da la extraña circunstancia de que dos árbitros, hermanos para más señas, son los encargados de repartirse el cupo otorgado esta temporada a dicha comunidad. Fernando, el malo de los dos, y José Antonio, el peor. El primero en llegar tenía poco nivel, al segundo no le alcanzaba ni para arbitrar en Segunda División, donde organizó más de un quilombo. Sin embargo, y de forma sorprendente, ascendió a Primera División.
No hace falta ir muy lejos para comprobar como se las gasta el Comité Nacional de Árbitros. El año pasado Miranda Torres fue elegido mejor colegiado de la categoría por los corresponsales del Diario Marca, que lo valoraron durante toda la temporada. Sin embargo, para el Comité Técnico de Árbitros merecía el descenso de categoría. Extraño, ¿Verdad?, ¿Caía mal Miranda Torres en el CNT o demasiado bien a todos los corresponsales de Marca?.
Pero vamos a lo que nos ocupa. Esta semana el Celta se jugaba gran parte de sus opciones de permanencia en dos partidos trascendentales. El miércoles ante el Atlético de Madrid, y hoy ante el Betis. Pues bien, la RFEF ha decidido dar esos dos partidos a los obedientes hermanos Teixeira Vitienes. El miércoles el Atlético de Madrid anotó dos goles en fuera de juego, y hoy se le hurtó al Celta un golazo por un fuera de juego a todas luces inexistentes, como podéis ver en la imagen. ¿Casualidad?. Tal vez.
Dirán aquello del "error humano", el equilibrio de fallos a final de temporada: "Unas veces te dan y otras te quitan", pero el caso es que al Celta nunca le dan y cada vez la afición deja de creer en aquello del error humano. Mallorca, dos claros penaltis no señalados a favor del Celta, el Penalty del Ciutat de Valencia, los goles en fuera de juego del Atlético, el anulado de hoy.. por no ir más hacia atrás recordando el gol de Jordi Alba, dos metros en fuera de juego, el arbitraje parcial del derbi de Balaídos... son tantas que muchas no las recordamos. ¿Y cuando fue la última vez que un error humano benefició al Celta?.
Pue eso, felicidades a esa gran familia que son los Texeira Vitienes. El año pasado seguirán arbitrando en Primera. Desgraciadamente, el Celta ha perdido la oportunidad de defender en el campo esa posibilidad. Y sí, el Celta ha hecho muchos méritos para descender. Tantos que no era necesaria la ayuda de esta gran familia con apellido gallego.
0 comments:
Publicar un comentario