![]() |
Foto: futbolbalear.es |
Por sorprendente que pueda parecer, Jonathan Vila se ha ganado por derecho propio un hueco en el once inicial. Digo sorprendente porque el rendimiento del porriñés no fue el esperado a lo largo de la pasada campaña, hasta el punto de perder su puesto de privilegio en favor de Oier Sanjurjo, que nunca había actuado como central y acabó siendo una de las revelaciones de la temporada en Segunda División. Este año, con mayor competencia y en Primera División, los minutos de Jonathan Vila aventuraban ser escasos.
Pero los acontecimientos han llevado al Celta a una situación tan extraña que hasta lo más raro puede ser normal. En verano se fichó a Samuel y a Cabral, y en invierno, tras la lesión del primero, llegó Vadim Demidov, que no tardó en hacerse con la titularidad al lado de Andrés Túñez. Sin embargo una lesión del noruego propició la entrada de Vila al terreno de juego. Y desde entonces no hay quien lo saque. Ha sido titular en las dos últimas jornadas formando pareja en el eje de la zaga con Túñez, y ha superado claramente a Gustavo Cabral en la rotación, cuya falta de confianza le ha convertido en un defensa vulgar.
La pasada semana Demidov fue el descarte de Abel. Aunque el noruego estaba recuperado, Abel prefirió no forzar, pero su ausencia no fue únicamente por este motivo, sino por la confianza que ha depositado en Vila, y aunque el rendimiento de Demidov no ha sido nada malo, parece muy extraño que el técnico toledano saque a Vila del once. Al menos por el momento. Su buen entendimiento con Túñez le ha valido al Celta cierta solidez defensiva. También ayuda la entrada de Natxo Insa en el equipo, y la variación táctica de Abel Resino, que ahora apuesta por un equipo más compacto y con la espalda más protegida.
Aún queda temporada por delante, cada vez menos, y muchas cosas pueden pasar, pero Jonathan Vila se está asentando como la pareja de Túñez, el único central totalmente indiscutible toda la temporada. Atípica temporada esta en la que Vila acaba siendo indiscutible en el once. Y de momento, se lo va mereciendo gracias a una increíble capacidad de adaptación, de supervivencia, esa que le ha llevado a estar en el Celta durante las últimas siete temporadas, y esa capacidad de supervivencia que tanto necesita su equipo en este momento.
0 comments:
Publicar un comentario