Pareja inédita para Cornellá


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Jonathan Vila es el más polifacético de los hombres defensivos del Celta. El miércoles volvió tres años después a la posición de mediocentro y esta tarde estrenará pareja de baile como central con Gustavo Cabral. Hasta el momento todas sus apariciones habían sido con Túñez como acompañante. Curiosidades del destino, el maratón de partidos del compostelano se detiene en el punto de arranque de su cuento de hadas, el mes de enero. «Con Túñez coincidí en todos los partidos, con Cabral coincidí con defensa de cinco contra el Atlético de Madrid», recuerda Jonathan Vila, que se perfila como titular, aunque dice desconocer su futuro inmediato: «Estoy entrenando de central y esa es mi posición. Si juego o no, ya no es cosa mía».

Vila vuelve al centro de la defensa por la vía rápida después de una esporádica aparición en su puesto de toda la vida, pero en el Bernabéu se dio cuenta de que su reconversión no tiene marcha atrás. «Costó un poco porque llevaba tres años sin jugar en esa demarcación de mediocentro. En estos momentos creo que mi posición es la de central y ahí me estoy encontrando cómodo y muy a gusto», reconoció ayer de de Budiño.

Vila cuenta además con un sexto sentido a la hora de jugar. Ha estado en todos los partidos grandes y ahora aparece como claro candidato para una cita con el cartel de trascendental. «He jugado en partidos importantes y complicados, pero el más trascendental que tenemos ahora es del de mañana [por hoy] para poder conseguir esos 21 puntos ansiados para despedir la primera vuelta», comenta mientras reconoce que no esperaba jugar tanto -cinco partidos en Liga y dos en Copa- después de lo visto en el verano. «Tal y como fue la pretemporada parecía que no iba a tener muchas oportunidades pero siempre dije que con trabajo todo se podía conseguir. Sé que tengo que seguir mejorando para tratar de tener muchas más oportunidades».

Jonathan Vila está recuperado en el plano físico y anímico de todo lo vivido en Madrid el miércoles y con la lección aprendida para frenar a Sergio García. «Hay que estar muy atentos porque es un grandísimo jugador. Tenemos que estar por detrás intentando hacerle la cobertura porque sabemos que sale muy rápido». Como uno de los capitanes, tiene claro que el objetivo de los 21 puntos es irrenunciable. «Estaríamos en el ecuador. En el buen camino».

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