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| RICARDO GROBAS |
La cuenta atrás de la permanencia se ha activado para el Celta con el inicio de la segunda vuelta, en la que el grupo de Herrera mejora de momento en dos puntos los resultados de la primera merced a los empates obtenidos ante el Málaga y la Real Sociedad. Tras salvar los muebles en inferioridad ante los donostiarras, el equipo vigués retornó ayer a los entrenamientos para preparar su visita a El Sadar, un encuentro marcado en rojo en el calendario, con más que tres puntos en juego, al que se otorga casi el valor de una final, la primera ante un rival directo en la lucha por la permanencia.
Mario Bermejo no alberga ninguna duda a este respeto. "Ya empiezan a llegar partidos importantes y este contra Osasuna es muy importante. Nos jugamos más que tres puntos", destacó el delantero, que valora incluso la posibilidad de un empate. "Ganar sería muy importante, pero teniendo en cuenta el resultado de la primera vuelta, no perder sería también un buen resultado", puntualizó el artillero, que dejó claro que el objetivo del Celta es ganar a Osasuna. "Es evidente que trataremos de ganar pero si empatamos no nos recortan y mantendremos a favor el golaverage".
Bermejo pronostica un partido lleno de dificultades para el Celta por la mejoría que ha experimentado el rival y el ambiente hostil que se va a encontrar el equipo en El Sadar. "Han tomado aire en la clasificación y esto hace que para ellos este partido también sea una final, va a ser un partido de mucha guerra". Por eso, advierte, el artillero celeste, no bastará con jugar bien. "Con jugar bien la pelota no nos va a bastar. Para ganar este partido vamos a tener que echarle muchos huevos. Tener una mentalidad de casta y de garra al cien por cien", sentencia.
El defensa central Vadim Demidov comparte la tesis de Bermejo sobre la necesidad de afrontar con agresividad el duelo ante lo rojillos. "Es un partido muy importante para los dos equipos y tendremos que pelearlo a tope", subraya el noruego. Y añade: "Sabemos que en el campo de Osasuna es muy difícil porque es muy íntimo y la gente aprieta mucho. Necesitamos tres puntos y hay que ir allí con la idea de sumarlos. No es importante jugar bonito, sino ganar. Solo debemos pensar en ganar".
El Celta cuenta para Pamplona con las bajas de algunos de sus titulares. No estará Krohn-Dehli, que vio frente a la Real Sociedad la quinta cartulina amarilla y cumplirá sanción y probablemente tampoco Augusto Fernández, expulsado por doble amarilla frente a los donostiarras. El Celta, no obstante, ha presentado alegaciones ante el Comité de Competición contra la segunda cartulina mostrada por Paradas Romero al centrocampista argentino y ha recurrido también la expulsión del técnico, Paco Herrera. El órgano disciplinario de la RFEF resolverá hoy ambos casos.
Para el decisivo duelo de Pamplona Paco Herrera cuenta también con la duda de Iago Aspas, quien no pudo concluir el choque del pasado sábado por causa de una lumbalgia. Las optimistas previsiones de los servicios médicos en torno a la recuperación del moañés se cumplen favorablemente. El tratamiento farmacológico y de fisioterapia está funcionando y el dolor que el jugador sufría en la espalda ha remitido considerablemente. Los médicos esperan, de hecho, que se incorpore paulatinamente al trabajo con el grupo y pueda estar a disposición del técnico. La esperanzadora evolución de Aspas no es la única buena noticia que proporcionó ayer la enfermería celeste. Andrés Túñez completó con normalidad el entrenamiento y hoy recibirá el alta médica.
La importancia del choque del sábado tampoco ha pasado inadvertida a la cúpula celeste, que ayer se desplazó hasta A Madroa para charlar con Paco Herrera sobre la actualidad del equipo y conocer el estado del plantel ante tan señalada cita. El presidente, Carlos Mouriño, el vicepresidente Ricardo Barros y el director general, Antonio Chaves, se reunieron con el técnico durante más de una hora en la cafetería de la ciudad deportiva. A última hora se sumó al encuentro el segundo entrenador, Ángel Rodríguez, quien, salvo que lo remedie el recurso presentado por el club, será el encargado de dirigir al equipo el próximo sábado en Pamplona.
En la reunión estuvo ausente el director deportivo, Miguel Torrecilla, y no se abordó la cuestión de los fichajes. El técnico sabe que las posibilidades de reforzar el equipo en este mercado de invierno con un futbolista de ataque son escasas y ya se ha hecho a la idea de que tendrá que luchar por la permanencia con lo puesto. En el club, de hecho, hay más preocupación por el choque ante Osasuna que por firmar un tercer fichaje antes del jueves.
Julio Bernardo / Faro de Vigo
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