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| Foto: Abel F. Ros |
La plantilla no se va a mover ni un milímetro de la consigna establecida: partido a partido. Herrera no se va a cansar de establecerlo. Sabedor de que la euforia comienza a crecer por las calles de Vigo, quiere hacer escapar a sus jugadores de ello. El Xerez es un rival que hay que respetar, que lanzó un serio aviso el pasado domingo ganando al líder. No se le teme pero el entrenador apunta a su peligro.
Para que nada se escape y perder esta oportunidad única, el mister pone el freno de mano: “No en nosotros, pero si lo noto en la calle. Pero es normal en el aficionado de la calle, que ve sencillo dar esos tres pasos pero para nosotros cada paso son kilómetros.” Una euforia peligrosa si la plantilla no sabe gestionarla, le debe servir solo de acicate para fijarse solo en el siguiente partido: “Ellos se han apropiado de eso, no ven más allá. A veces se te escapa pero enseguida entre nosotros mismos lo cortamos y nos centramos en el Xerez, que es un rival de cuidado.”
El equipo andaluz viene de ganar ante el Deportivo y eso “vino bien, viendo el partido dije que este equipo está a un nivel de la leche. En la primera vuelta nos pasó por encima en mucha parte del partido.” Para combatirlo, las consignas son claras: “Pasa por la concentración absoluta en nuestro trabajo y en centrarnos en el juego, exclusivamente en el juego y respetar mucho al rival pero sin temerle.”
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