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| Foto: José Lores / FDV |
Semana intensa la que le espera al Celta, que tendrá que disputar tres partidos de Liga en ocho días, con el consiguiente desgaste que esto supone para una plantilla que no está acostumbrado a realizarlo. La buena noticia para Paco Herrera es que en principio podrá contar con todo su arsenal para hacer frente a Huesca, Girona y Villarreal B, ya que únicamente aparece en el parte médico Carlos Bellvís, que arrastra todavía molestias por el esguince que sufrió ante el Valladolid hace diez días pero que ha entrenado con total normalidad esta semana y podría recibir el alta médica incluso para el partido de mañana ante el Huesca.
El valenciano, como muchos de sus compañeros que han disfrutado de menos oportunidades hasta el momento, ha opositado seriamente en la Copa del Rey para tener más presencia y la acumulación de partidos podría darle minutos a todos, ya que el técnico céltico ha señalado desde el comienzo de la temporada que tenía en mente llevar a cabo una política de rotaciones para evitar que a los vigueses le sucediera lo mismo que el año pasado, cuando el equipo acabó desfondado físicamente en el último tramo de Liga.
De esta manera, es muy probable que los onces titulares que presente el Celta ante Huesca, mañana, y Girona, martes, sean muy diferentes y haya pocos jugadores que repitan, especialmente los que más carga de partidos llevan soportada estos dos meses de competición. En los primeros ocho encuentros del campeonato, el técnico había ido realizando pequeños retoques en cada uno de ellos, sin conseguir repetir alineación nunca pero manteniendo siempre una columna vertebral, con diez jugadores que superan los 500 minutos de juego.
El poco tiempo de descanso entre los enfrentamientos entre Huesca y Girona provocará que jugadores que hasta el momento han sido indiscutibles pasen también por el banquillo y den la oportunidad a hombres como Túñez o Toni, que seguramente tendrán su oportunidad para reivindicarse e intentar ganarse la confianza de su entrenador. Es el momento en que tiene que notarse que el Celta posee un fondo de armario amplio para que juegue quien juegue no baje el rendimiento.
Habrá que ver también como vuelve a lidiar Herrera con el overbooking en la zona ofensiva, donde Iago Aspas, con su gran actuación en el choque del pasado domingo ante el Xerez y en la Copa ante el Valladolid, se ha ganado el derecho a salir desde el inicio. El gran dilema es saber si el moañés tendrá la oportunidad ante los oscenses o tendrá que esperar al martes ante el Girona, ya que sus compañeros de ataque también están en buena forma, por la que la decisión final será delicada, ya que en la lista de aspirantes está también el chileno Fabián Orellana, el fichaje estrella de este verano y que no juega desde la derrota ante el Las Palmas.
Importante es la semana para uno que lo está pasando mal esta campaña, Dani Abalo, que está siendo el descarte habitual de las últimas semanas. La incógnita es si Herrera lo incluirá en la política de rotaciones del equipo o seguirá sin contar con él, lo que podría suponer un duro revés para la moral del arousano y la confirmación de que tendrá muy difícil contar con minutos este año en Vigo.
Faro de Vigo
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