MVP Temporada 2008-09 | Ariel Rosada


El pasado domingo comenzó la Liga y con ella, la 7ª edición de la elección al mejor jugador de la temporada, que comenzamos en el Flog del Celta allá por la Temporada 2005-06. Durante estos días, recordaremos a los ganadores de las ediciones anteriores, aquellos que fueron elegidos por vosotros, por los lectores, como los más destacados del año, primero en el Flog y ahora en moiceleste.com, donde mantenemos y reforzamos la tradición de que seáis vosotros los que decidáis quienes son los mejores, año tras año.  Recordad que aquí podéis ver el Ranking de las temporadas anteriores, y ahora vamos con la 2008-09, que supuso un gran cambio en la filosofía del Celta y que casi nos cuesta un disgusto.


1 Ariel Rosada
Denostado por la afición tras una mala primera temporada, en la que llegó pasado de forma en el mercado invernal, Rosada pudo reconciliarse con la grada con una segunda temporada en la que mostró todas sus virtudes, especialmente la contundencia, la lucha, el derroche físico y también, cierta calidad. Nadie fue capaz de sacar al argentino de la titularidad después de callar las bocas más críticas con su rendimiento, acabó siendo aclamado y sacado a hombros por sus compañeros en el partido ante el Alavés.


2 Antonio Notario
A diferencia de Rosada, a Notario la afición lo quiso desde el principio. Portero siempre cercano a la polémica, se convirtió en el salvador del Celta parando todo penalty que le tiraban. No solo destacó en las penas máximas, ya que el apelativo de "San Notario" se lo ganó a pulso gracias a actuaciones espectaculares que mantuvieron vivo al Celta en el campeonato. Con la llegada de Eusebio, perdió la titularidad en favor de Falcón, en una decisión que poca gente comprendió hasta que supimos lo que pasaba en aquel convulso vestuario.


3 Kamel Ghilas
Llegó a Vigo como el fichaje estrella y no defraudó. El argelino fue un estilete en la parte ofensiva del equipo, con goles importantísimos y un rendimiento basado en la lucha y el compromiso, pero también la calidad. Ghilas jugó en todas las posiciones de ataque y respondió en casi todas, aunque se perdió muchos partidos por las convocatorias con su selección, lo que no impidió que fuese uno de los jugadores más determinantes de aquel año. 

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