No nos han dejado ascender

Al margen de nuestros propios errores, que también los hubo y que habrá tiempo de analizar con detalle, el partido de vuelta de la semifinal por el ascenso evidenció lo que durante la temporada muchos intuíamos; Nos nos iban a dejar subir. Hemos recibido bastantes críticas por la crónica del partido, pero, una vez más, nos hemos visto abocados a hablar en ese tono de los árbitros, porque, partido tras partido, nos han demostrado que no nos lo iban a poner fácil.

Lesma López, árbitro madrileño con una fama horrible y pintaza de subir a Primera División, no hizo sino completar el arduo trabajo que durante la temporada han hecho sus colegas del pito. Nos ha puesto la guinda, nos ha rematado y ante eso es muy dificil de competir. Que en un partido nos hayan pitado en contra más penaltis que los que nos han pitado a favor en toda la temporada deja a las claras lo que ha hecho el estamento arbitral esta temporada. Pero hay otro dato. ¿Sabéis cuántos penaltis le habían pitado a favor al Granada este año hasta este partido? Dos, exactamente los mismos que le pitaron ayer. ¿Casualidades?

Y sí, sé que Herrera se equivocó con el planteamiento, entregando la pelota al Granada, que no tiene jugadores mancos. Y sí, sé que ellos tuvieron varios palos o algún gol que salvó Yoel. Todo eso lo sé, pero no entraron. Estuvimos en el partido hasta el final, con todo en contra, y no fue poco precisamente.

Para empezar un clarísimo penalty sobre Álex López que no ve Lesma López, aunque acto seguido si vio el de Catalá a Ighalo. Como también vio el de Roberto Lago, absolutamente inexistente, que le costó la expulsión diez minutos después al ver la segunda amarilla. No había penalty, no había primera amarilla, no había expulsión. Carlos Calvo, con una tarjeta amarilla, se lleva el balón con la mano con clara voluntariedad. Lesma López señala la falta, pero no muestra la segunda amarilla que supondría la expulsión de Carlos Calvo. Y no nos olvidemos del extraña falta de Iago Aspas por ¿Saltar? ante un jugador del Granada. La jugada estaba parada, no es gol anulado, pero los jugadores del Granada defendieron como si esta siguiera y fueron los primeros sorprendidos por la señalización de la falta que anulaba el gol de Abalo.

Han sido muchos detalles, que han llegado hasta la tanda de penaltys, donde Iago Aspas fue expulsado por mandar callar a Roberto. Lo que éste le dijo antes de tirar el penalty, además de la actitud de cani no contó para Lesma López. Son cosas del fútbol, y ahí deben de quedar. Y es que lo peor de todo es que aunque hubiésemos pasado la eliminatoria con el penalty de Michu, ¿En qué condiciones afrontaríamos la final con dos jugadores importantes sancionados? Hoy sé que no nos han dejado subir.

Y ojo, esto no implica que nosotros no hayamos hecho las cosas mal en determinados momentos, y que ayer tuvimos parte evidente de culpa en la eliminación. Tampoco seamos extremistas, pero es evidente que el arbitraje nos perjudicó gravemente, hasta el punto de ser parte fundamental en la eliminación.  Que Herrera se equivoque no debe tapar los errores del arbitro, como los de éste no deben tapar los de Herrera, pero incluso con los errores de nuestro técnico, un gol mal anulado y un penalty no pitado hubiesen sido suficiente para eliminar al Granada.

Es momento de ver qué le pasa a la Federación con los equipos gallegos, y más vale que los dos grandes de Galicia se unieran por una vez para pedir respeto y hablar con quién tengan que hablar, por supuesto en privado. Seguramente se me vuelva a acusar de parcial, de no ver la realidad, de no tener juicio, etc, etc. Prefiero eso a que sigan meando por encima de nosotros y digamos que simplemente es lluvia.