El Celta buscará romper la racha de tres derrotas consecutivas ante un dificil Granada, que se presenta como uno de los mejores equipos como local, con la obligación de sacar algo positivo de Los Cármenes tras los resultados de sus rivales por el ascenso directo.
Y es que la jornada del sábado no fue todo lo positiva que podríamos esperar. Pase lo que pase en Granada, el Celta no terminará la jornada en puestos de ascenso y sólo una victoria convertiría en bueno el empate agónico obtenido por el Rayo Vallecano en Huelva. El Betis venció al Salamanca, otra vez con polémica arbitral, y se aúpa al liderato de la tabla con 5 puntos de ventaja sobre el Celta.
De ahí la importancia de este partido. Una derrota del Celta dejaría al conjunto celeste un tanto descabalgado de la lucha por el ascenso directo en un escenario complejo, inimaginable hace tan sólo 3 semanas. Por ello, la trascendencia del choque puede pesar en las piernas de los jugadores celtiñas.
Claro que los jugadores del Granada no jugarán precisamente sueltos. Después de flirtear con el ascenso directo en las últimas jornadas, una mala racha de resultados ha llevado al conjunto de la Alhambra a sufrir por mantener su posición en la lucha por el Play-off hasta el punto de que su renta se ha visto reducida a la mínima expresión.
El Granada llega al encuentro tras el valioso punto sumado la pasada semana en el feudo del Rayo Vallecano (1-1) pero tras tres semanas sin ganar, ya que antes cedió en Girona (2-0) y rompió sus espectaculares números como local al ceder frente al Salamanca (0-1). Buscará ante el Celta una victoria que le devuelva a la buena senda, le vuelva a hacer fuerte ante su público y le permita mantenerse en la privilegiada zona de promoción de ascenso, además de reducir puntos en la tabla con el cuadro vigués.
El técnico gallego Fabri González tiene para el choque la baja por acumulación de tarjetas del defensa central Diego Mainz, que será sustituido por Lucena, mientras que regresará al once titular tras estar ausente contra el Rayo por sanción el centrocampista Mikel Rico. La única duda del preparador rojiblanco es usar a Abel Gómez como acompañante de Rico en la medular, con lo que actuaría Carlos Calvo como media punta o colocar a Abel Gómez más adelante y que Juande juegue de inicio en el doble pivote.
No serán menos las ausencias en el Celta. Paco Herrera se vio obligado a convocar a Ikechi, y se quedaron en Vigo los lesionados Hugo Mallo, Jonathan Vila y Joan Tomás, mientras que Bustos hizo lo propio por acumulación de tarjetas. A esas bajas se une Michu, que entra en la convocatoria pero no está al 100% por unos problemas físicos que arrastra desde el choque de Tarragona.
El equipo que presente Herrera estará formado por Falcón bajo palos, línea de cuatro con Murillo, Ortega, Catalá y Roberto Lago. Por delante de ellos estarán Oubiña, López Garai y Álex López en el pivote, con Trashorras de enganche, y David y De Lucas como puntas de lanza.
Herrera comentó que Oubiña tal vez vuelva a disputar tan sólo 45 minutos, ya que la exigencia de este partido será superior a la del pasado sábado, lo que contrarrestará la clara mejoría física del vigués. También comentó que no espera a un Granada que aguarde al Celta, sino un Granada intenso que salga a su encuentro presionando la salida de balón del conjunto celtiña.
Será un partido a cara de perro. Muy atractivo para el espectador imparcial, y de infarto para los implicados. Ganar será fundamental para no perder el tren del ascenso. Hace un mes, un empate sería bueno en Granada. A día de hoy podría considerarse incluso un mal resultado.
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