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| Foto: Jorge Landín / Atlántico Diario |
Desde la llegada de Claudio Giráldez al primer equipo, Hugo Álvarez ha ocupado habitualmente la posición de carrilero, tanto por la derecha como, sobre todo, por la izquierda. Salvo en su debut ante el Sevilla, donde actuó como interior o extremo, su rol ha sido siempre el de carrilero, algo que este verano parece estar cambiando.
En los tres amistosos que ha disputado el Celta durante la pretemporada, Hugo Álvarez ha jugado en posiciones de ataque: ante el Famalicão y el Braga lo hizo por la banda izquierda, y ayer, frente al Nacional, por la derecha. En todos los casos actuó como extremo. ¿Se trata de un cambio de rol planificado para el jugador o de una solución forzada por la falta de efectivos en ataque?
Es evidente que el Celta atraviesa un problema numérico en la parcela ofensiva. Se han marchado Alfon, Fer López e Iker Losada, y por el momento no ha llegado ningún refuerzo. Ferran Jutglà podría ocupar una de las bandas, pero, al ser junto a Pablo Durán uno de los únicos delanteros centro disponibles, ha sido utilizado exclusivamente en esa posición. Esto deja a Claudio Giráldez con pocas opciones en ataque, y podría explicar que el uso de Hugo Álvarez como extremo responda más a una necesidad que a una apuesta táctica o un experimento.
En cualquier caso, se trata de una posición en la que puede rendir a buen nivel. Ante Famalicão y Braga se mostró algo más apagado, en línea con el rendimiento general del equipo, pero ayer firmó una actuación notable. Se entendió bien con Javi Rueda y con sus compañeros en la delantera, y dispuso de dos ocasiones muy claras de gol: en la primera se topó con una gran intervención del guardameta portugués, y en la segunda no estuvo acertado en la definición.
El canterano es un futbolista muy valorado por Claudio Giráldez, ya que le ofrece polivalencia y un rendimiento fiable en varias posiciones. La pasada temporada tuvo una actuación más discreta en la segunda vuelta, marcada por la lesión sufrida a comienzos de año, pero ya totalmente recuperado, se espera que Hugo Álvarez muestre su mejor versión, que, por cierto, es muy buena.
