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| Foto: RC Celta |
Manu Fernández ha sido uno de los jugadores del Celta Fortuna renovados este verano. Además, el ferrolano está realizando la pretemporada con el primer equipo, y hubiese tenido minutos el pasado martes de no mediar unos inoportunos problemas físicos por los que el cuerpo técnico del Celta prefirió no arriesgar y dejar fuera al canterano.
Sus opciones para quedarse en la plantilla son reales, y más con Claudio Giráldez, un técnico que ya demostró en el pasado que no le tiembla el pulso a la hora de apostar por los jugadores que vienen de abajo, y volverá a hacerlo si es necesario. Eso no significa que el zaguero tenga garantizada su presencia en el equipo, a pesar de que cubre un perfil que está buscando el Celta: Un jugador que pueda actuar como central o mediocentro.
Manu Fernández era mediocentro cuando llegó a la cantera del Celta, y poco a poco ha ido retrasando su posición hasta ejercer mayoritariamente como central, pero incluso la pasada temporada con Fredi Álvarez ejerció en la medular cuando se produjeron ausencias de compañeros, por ejemplo de Miguel Román. Por lo tanto, el Celta puede tener en casa ese perfil que está buscando en el mercado.
Pero también se abre la posibilidad de una cesión a un equipo de Segunda División, sabiendo que es difícil encontrarle destino (y minutos) en Primera División. Su nombre sonó la pasada temporada para el Espanyol, pero también para algunos equipos de Segunda División. El Celta sabe que tiene mercado en la categoría de plata, y podría ser una opción más que interesante para un jugador que necesita adaptarse progresivamente al fútbol profesional, y que podría vivir una experiencia tan positiva como la de Javi Rueda en el Albacete. Un año después, el andaluz regresa para quedarse en el equipo.
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