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| Foto: RC Celta |
El Celta Fortuna cayó esta noche en Balaídos, y sumó su tercera derrota consecutiva ante el Deportivo, que tuvo en el balón parado su principal arma para llevarse los tres puntos de Balaídos. El gol del Celta llegó en tiempo de descuento, con poco tiempo para la remontada, que no se pudo completar. Justo antes del 0-2 el árbitro no señaló un penalti bastante claro por manos dentro del área deportivista, que hubiese podido cambiar el desenlace del encuentro.
De inicio Claudio Giráldez apostó por un once inicial formado por Ruly García, Javi Rueda, Yoel Lago, Joel López, Javi Rodríguez, Miguel Román, Damián, Hugo Álvarez, Alfon, Raúl Blanco y Pablo Durán.
Los primeros 45 minutos se disputaron con un ritmo de vértigo, impropio de la categoría, con el balón viajando de un área a otro sin ningún tipo de control. En ese toma y daca era el Fortuna quien estuvo más cerca de golpear, especialmente en el minuto 21 con un disparo de Miguel Román al palo. El portero estaba batido, pero el balón no encontró la portería por centímetros.
El Deportivo exponía su peligro en acciones a balón parado, y poco más, y se defendía como podía para evitar que las combinaciones del ataque celeste tuvieran consecuencias en el marcador. Raúl Blanco, Alfon y Pablo Durán lo intentaron en varias ocasiones, sin excesivo acierto en la finalización.
Tras el descanso cambió el partido, que se volvió mucho más pausado, más propio de la categoría. Y en este nuevo escenario al Celta le costó mucho más generar peligro, aunque tuvo una bastante clara en las botas de Alfon, quien desde el perfil derecho del área no pudo batir a Germán.
Y pocos minutos después llegó el gol del Deportivo, que anotó tras un lanzamiento de falta y el despeje fallido de Javi Rueda que aprovecha Pablo Vázquez para ejecutar a Ruly. A partir de ahí el partido se puso de cara para el Deportivo, que esperaba atrás bien pertrechado esperando una contra para marcar el 0-2.
El plan de partido le salió bien porque encontró ese gol, pero justo antes de esa jugada se produjo una acción muy polémica cuando un disparo de Alfon fue repelido por un zaguero rival en el interior del área. El penalti, a la vista de las repeticiones, admite poca discusión, pero desgraciadamente en esta categoría no existe el VAR.
Con el 0-2 a la contra del Deportivo parecía finiquitado el encuentro, pero el Celta Fortuna aún tuvo arrestos para marcar el 1-2 en una excelente maniobra de Manu Garrido, que había saltado al terreno de juego unos minutos antes.
Era el minuto 91 y todavía había tiempo, pero desgraciadamente el ritmo se cortó después de que unos indeseables en la grada de Marcador comenzasen a lanzar botellas al terreno de juego. El partido estuvo parado al menos tres minutos, y cuando se reanudó el Celta fue incapaz de acercarse a la meta rival. Era difícil, pero tras el gol había opciones, que se evaporaron por la ocurrencia de estos “aficionados”.
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