Orbelín volvió a ser una opción residual a pesar de la ausencia de Cervi



La temporada de Orbelín Pineda en el Celta seguramente no está siendo lo que esperaba el internacional mexicano cuando aterrizó, cargado de ilusión, en Vigo a principios del mes de enero. Desde entonces ha tenido que ver muchos partidos desde el banquillo, solo pudo jugar ante el Levante una media hora, y ayer tuvo sus primeros minutos lejos de Balaídos, aunque apenas fueron un puñado, saltando al terreno de juego en el minuto 86.

Eduardo Coudet comentó en la víspera del partido que estaba intentando readaptar al futbolista, como recambio de Iago Aspas, ya que en su posición, el extremo izquierdo, contaba con dos jugadores, Nolito y Cervi. Ayer, sin embargo, salió en esta posición, pero no fue la primera opción del Chacho. Con Cervi fuera de circulación por una fascitis plantar, Orbelín se convertía en la segunda opción para esa posición.

Nolito fue el titular, pero cuando fue retirado del terreno de juego, el Chacho no optó por la segunda opción, sino que introdujo en el terreno de juego a Solari, enviando a Brais Méndez a la banda izquierda. Solo cuando el Celta tuvo que atacar a la desesperada entró en juego Orbelín, en este caso porque Solari retrasaba su posición y Brais volvía a la banda derecha. La participación del mexicano, en todo caso, fue bastante discreta durante los escasos minutos que estuvo en el terreno de juego. Apenas entró en contacto con el balón, y eso que el Celta gozó de tres ocasiones muy claras con él en la cancha.


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