Iago Aspas rompió la maldición



A Iago Aspas se le resistían dos equipos de Primera División a los que nunca pudo marcar ningún gol: Getafe y Elche. Hablamos en pasado porque uno de ellos ya ha caído gracias al gol anotado ayer por el jugador céltico, que además sirvió para robar un punto al equipo de Jose Bordalás. 

Una decena de partidos necesitó el artillero del Morrazo para derrotar una maldición que se extendía durante varios años. No solo le ha costado marcarle al Getafe, sino que guarda una relación bastante complicada con el Coliseum Alfonso Pérez, donde protagonizó una fea acción en su primer partido en dicho estadio. 

Corría la Temporada 2012-13, en un mal partido del Celta, que acabó costando la destitución de Paco Herrera. El técnico catalán decidió retirar del campo a Aspas, y éste no se lo tomó nada bien, saliendo sin saludar a Santi Mina, que estaba debutando en Primera División, y con gestos que evidenciaban su enfado por la decisión del entrenador. 

Han pasado más de siete años desde entonces, y este Aspas, mucho más maduro, es el líder indiscutible del equipo y para muchos el mejor jugador en la historia de un club casi centenario. Ayer logró romper esa maldición, que le perseguía a él en particular, y también al Celta, que solo pudo ganar una vez en esa cancha. 

0 comentarios:

Publicar un comentario