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| Foto: RC Celta |
La presente está siendo la mejor temporada de Iago Aspas, que está llegando a este final de temporada bastante justo a nivel físico, lo cual no es precisamente una buena noticia para el Celta. Una de las explicaciones de este bajón físico pueden estar en la posición que ocupa desde hace unos meses en el terreno de juego, más pegado a la banda derecha que como delantero centro, lo que le obliga a realizar muchas ayudas defensivas al lateral, con el consiguiente desgaste.
Más allá de esta cuestión, que es muy importante, está el tema de su rendimiento sobre el terreno de juego. Aspas ha hecho una temporada tan completa, que incluso jugando de portero sería capaz de crear peligro, pero es evidente que en la banda está más alejado de la portería, y entrar en sorpresa le cuesta porque todos los equipos saben a quien tienen que marcar.
Aún así ha sido capaz en muchos partidos de ser importante, y siguió marcando muchos goles a pesar de abandonar la posición de delantero centro. Un cambio en cierto modo obligado, ya que las actuaciones de Guidetti le hicieron acreedor de un puesto en el once inicial, y para ello era obligatorio que Aspas se alejase del centro.
El propio jugador habló ayer sobre esta cuestión: “Es una decisión del míster. Yo lo que quiero es jugar y disfrutar dentro del terreno de juego. También depende del partido y del rival. Ellos también juegan, hay situaciones que el míster prefiere que esté más en la banda y otras más en el centro. El rival también juega y lee los movimientos, y es difícil”, argumentó.
Veremos qué decisión toma finalmente Berizzo, pero uno de los cambios que está barajando podría ser el posición de Iago Aspas, lo que evidentemente llevaría a Guidetti al banquillo. En todo caso lo veremos mañana antes del partido. Confiemos en que Berizzo tome la mejor decisión para el equipo.
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