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| Foto: Reuters |
Puede que nos engañe su juventud, pero Jonny está dispuesto a batir todos los récords habidos y por haber en cuanto a número de partidos disputados. El de Matamá cumplirá 23 años el próximo mes de marzo, y con su edad ya es el jugador del Celta que más partidos ha jugado en Primera División con la camiseta celeste de la actual plantilla.
Además, el próximo domingo, en caso de que Berizzo estime conveniente contar con él, disputará su partido 150 con la camiseta del Celta, desde que hace más de cuatro años, debutase con el primer equipo en un partido de Liga frente a Osasuna. Aquel día, Hugo Mallo sufrió una indisposición a escasas horas del comienzo del partido, y Paco Herrera decidió llamar de urgencia al canterano, que fue titular y mostró una madurez impropia de un futbolista de 18 años y sin experiencia alguna en el fútbol profesional.
Desde entonces, ha ido quemando etapas a un ritmo veloz. Luis Enrique lo reconvirtió en lateral izquierdo y cambió su vida. De eterno suplente de Hugo Mallo pasó a convertirse en titular indiscutible, y en esa misma posición ha venido jugando las tres últimas temporadas, ya con Berizzo en el banquillo. En su primer año jugó 19 partidos, al siguiente 26, y los dos últimos, con el técnico argentino al mando, ha disputado 36 encuentros.
Si sumamos todos los partidos oficiales, acumula un total de 149 y 2 goles. Uno lo marcó en la Copa del Rey, ante el Cádiz, y el otro fue en un partido de Liga disputado en Balaídos ante el Eibar. Esta está siendo una temporada dura para él, que se suma al mal momento con el que acabó la pasada Liga. Sin embargo, es un futbolista con potencial, juventud y talento suficiente para marcar una época en el Celta. No es fácil jugar 150 partidos antes de cumplir los 23 años. Él puede presumir de haberlo hecho.
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